Las organizaciones particiantes en la mesa, que se reunió en una sede de UGT, son Copyme, Cepyme Madrid, Concapy, la catalana Sefes, la vasca Fevascoa, Pymes Andalucía, Pymes Castilla y León, Pymes Castilla La Mancha y Pymes Cantabria, según informaron a Servimedia fuentes de Copyme.

En una rueda de prensa previa, el presidente de Copyme, José Ajenjo, explicó que la mesa estudiará en los próximos días la convocatoria de un cierre patronal de todos los pequeños y medianos empresarios de España para un día de marzo todavía por dterminar.

Este cierre irá precedido del que se realizará el próximo martes en el ámbito de la Comunidad de Madrid, sin que ninguna de estas dos movilizaciones cuente con el respaldo de la patronal CEOE, que es partidaria de una autorregulación pactada de horarios entre los pequeños comerciantes y los grandes almacenes.

Ajenjo aseguró que, para el cierre patronal en toda España, esperan obtener el respaldo no sólo de los comerciantes sino de todos los pequeños y medianos empresarios, ya que la únia reivindicación específica del comercio es la regulación de horarios.

El resto, la oposición a la elevación de los alquileres prevista en el proyecto de ley de Arrendamientos Urbanos, y el rechazo tanto al Impuesto de Actividades Económicas como de los nuevos módulos del IRPF, es común a todas las empresas pequeñas y medias.

"APROPIACION INDEBIDA"

Los portavoces de estas organizaciones empresariales calificaron de "apropiación indebida" la presión tributaria a que les está sometiendo Haciendainsitieron en que llamarán a sus afiliados a la insumisión fiscal de todos los impuestos en 1993.

Asimismo, se felicitaron por su "plena coincidencia" de intereses con los sindicatos en defensa del pequeño comercio, que supone el 13,9 por ciento del empleo en España, al tiempo que criticaron a la CEOE por intentar utilizarles "como moneda de cambio".

Fuentes de la Federación de Comercio de CCOO señalaron a esta agencia que su sindicato respalda la promulgación de una ley para el sector que elimie la apertura en festivos, regule las ventas de rebajas y a domicilio, y limite el establecimientos de grandes superficies.

A su juicio, el comercio debería abrir unas 60 horas semanales, que son las que pueden cubrirse normalmente medinate turnos, teniendo en cuenta que la jornada de un trabajador es de 38 a 40 horas.

Por otra parte, las organizaciones patronales señalaron que el cierre del día 26 afectará a Mercamadrid, pero aclararon que eso no generará situaciones sensibles de desabastecimieno en la capital