El Parlamento modifica sustancialmente la propuesta de la Comisión Europa y fija las reglas de un sistema obligatorio de identificación y registro que se introducirá en dos fases. En la primera, a partir de septiembre de 2000, los operadores que comercialicen vacuno tendrán que hacer constar en la etiqueta cierta información sobre la carne y el lugar de sacrificio del animal.

Para la segunda fase, el pleno ha aprobado una enmienda por la que se adelanta la fecha (del 1 de enero de 2003 al 1 de septiembre de 2001), que refuerza el sistema al exigir que la etiqueta lleve inormación relativa al origen del animal, en concreto a su lugar de nacimiento, a la cría y al sacrificio. Esta enmienda modifica el texto propuesto por la Comisión, que establecía el año 2003 con el fin de que los Estados de la Unión pudieran completar todas sus bases de datos informáticas sobre animales sacrificados.

El Parlamento considera que se informa mejor a los consumidores si se indica el país de procedencia del ganado, en lugar de la región, como proponía el Ejecutivo.

Los eurodiputados hn mostrado su acuerdo en aplicar este mismo sistema de información a la carne de vacuno llegada de terceros países, y en caso de que estos datos no sean disponibles, poner en las etiquetas la mención "origen no comunitario".