De esta manera, ese 24% se ha repartido de forma proporcional y el resultado es que Cepsa y la compañía estatal argelina Sonatrach pasan del 20% al 26% cada una, y las eléctricas españolas Iberdrola y Endesa, y la gasista Gaz de France, del 12% al 16% cada una.

No obstante, esta composición del accionariado podría variar a finales de mes, según las mencionadas fuentes, cuando Medgaz tome la decisión de inversión y adjudique los contratos de obra, que está previsto que comience a finales de 2007.

El futuro gasoducto, que supondrá una inversión de entre 630 y 700 millones de euros, saldrá de la localidad argelina de Beni Sas, cerca de Orán, y llegará a la playa almeriense del Perdigal, donde conectará con el gasoducto Almería-Albacete de Enagás.