Obuses, morteros, granadas de mano, incluso algunos proyectiles antiaéreos que podían haber causado desgracias importantes de haber explosionado de forma espontánea, ya que en alguos casos se encontraban incluso en las cercanías de viviendas habitadas o en solares en construcción.

Este tipo de intervenciones sumaron un total de 73, consistentes, en la mayor parte de los casos, en la retirada del artefacto o su explosión controlada, si su estado desaconsejaba el desplazamiento.

Por otro lado, en 36 de sus intervenciones los agentes de UEDE desactivaron artefactos de distinto tipo preparados por ETA o su entorno para hacer explosión en distintas circunstancias.

En este rupo de intervenciones los agentes se enfrentaron tanto a la desactivación de un coche bomba cargado con 60 kg de dinamita, como a varias decenas de artefactos explosivos o incendiarios, de los denominados "caseros", dirigidos contra todo tipo de objetivos en el marco de la kale borroka.

Finalmente, UEDE llevó a cabo 16 intervenciones en relación con la recuperación y neutralización de artefactos explosivos o incendiarios de todo tipo, desde cócteles molotov a bombas "caseras", que por distintas razons no habían llegado a explosionar.