En un comunicado, Hernando lamentó que el nacionalismo "tiene que estar frotándose las manos ante la incoherencia socialista, que parece el inicio de un giro hacia las tesis de Arzalluz y una renuncia a los planteamientos que había mantenido".

A su juicio, esto supondría un grave error pues sería la "definitiva rendición del socialismo ante la política que ha puesto en marcha el nacionalismo para quebrar sus principios".

Para Hernando la expulsión del PP de gobierno de San Sebastián es un acto de "hostilidad injustificable" realizado por quien siempre ha estado más cerca de las tesis de Arzalluz que las de su propio partido en el País Vasco, cuando Nicolás Redondo era secretario general.

Hernando señaló además que las explicaciones dadas por la dirección nacional del PSOE "muestran la incapacidad de la dirección socialista de controlar a un Elorza que nunca vio con buenos ojos el Pacto Antiterrorista".

Asismismo, el dirigente popular señaló que no e puede estar pretendiendo en un sitio ilegalizar a Batasuna y aislar a los colaboradores de ETA y, por otro lado, ofrecerles en San Sebastián responsabilidades de gobierno.