Fuentes socialistas aseguraron a Servimedia que el jueves se llevará a afecto el acuerdo que para aprobar las cuentas vizcaínas alcanzaron en noviembre ambas partes.

Gracias a este pacto, los 10 junteros del PSE se abstendrán en la votación de los Presupuestos, lo que, gracias a 21 votos a favor de los representantes de PNV-EA, hará que el proyecto económico del Gobierno foral recia el visto bueno. Se espera que tanto PP (10 junteros) como Batasuna (9) se pronuncien en contra.

El acuerdo alcanzado entre el Ejecutivo nacionalista y el PSE ha sido posible después de que los socialistas lograsen la aceptación de diversas demandas, la primera de las cuales era que se dejase de financiar la Udalbiltza.

Asimismo, PNV-EA aceptó una serie de propuestas de carácter social y económico, como conceder una compensación a las pensiones más bajas o no llevar a cabo la privatización de diersos servicios sociales.

Este pacto presipuestario entre PNV-EA y PSE es el primer acuerdo de envergadura de este tipo que se cierra entre partidos nacionalistas y no nacionalistas desde la firma del Pacto de Estella en septiembre de 1998, uno de cuyos integrantes fue Euskal Herritarrok (EH), hoy Batasuna.

Esta declaración y la posterior tregua de la banda terrorista ETA llevaron a PNV y EA a negociar con EH los Presupuestos de la comunidad autónoma y de las diputaciones de Vizcaya y Guipúzcoa. Sin embargo, la reanudación de los atentados por parte de la organización criminal dejó en suspenso los acuerdos entre los nacionalistas y llevó el bloqueo a las instituciones vascas, ya que PSE y PP rechazaron negociar las cuentas públicas sin un cambio político.

Esto propició que las diputaciones vizcaína y guipuzcoana hayan funcionado con Presupuestos prorrogados desde 2000, año en el que las cuentas fueron pactadas por PNV y EA con EH.