En una entrevista publicada en "El Correo", Montoro sigue sin aceptar la cantidad de 151.000 millones de pesetas (908.000 euros) que el Gobierno vasco está dispuesto a pagar por las transferencias prestadas por el Estado español a la región y añadió que "la lógica dce que si el Cupo del año 2001 fue de 173.000 millones de pesetas (1'04 millones de euros), el de 2002 no puede ser muy diferente".

El titular de Hacienda cree "ideal" que se produzca un acuerdo de forma inmediata sobre el Concierto Económico, pero señala que el deseo del Ejecutivo vasco de tener presencia en la Unión Europea va a impedir que se produzca un consenso "a corto plazo" e "incluso va a hacer difícil que se pueda retomar la negociación".

En este sentido, añade estaría dispuesto a volve a sentarse a la mesa "en el momento en el que el Gobierno vasco presente una propuesta aceptable respecto a la UE".

Sin embargo, se muestra convencido de que el PNV no desea alcanzar un acuerdo y que ha optado "por la vía de la confrontación".

A este respecto, denuncia la actuación de la "vicelehendakari" Idoia Zenarruzabeitia en la ronda de contactos de finales del pasado año: "Es muy difícil sentarse en una mesa a negociar con alguien que todos los días hace declaraciones en las que falsea la ealidad, el contenido de las reuniones que se han celebrado y los acuerdos que se han alcanzado. Así no se puede negociar".

Montoro apunta tres posibilidades: que el Ejecutivo vasco "flexibilice" su posición sobre la UE y se firme un acuerdo, que se prorrogue nuevamente el Concierto Económico actual o que se alcance un acuerdo con las diputaciones forales, "que, en definitiva, son las instituciones en las que se asientan las competencias en materia fiscal".