Iturgáiz, que fue reelegido como "número uno" de los populares vascos por el 95 por ciento de los compromisarios asistentes al X Congreso Regional del PP, advirtió en su discurso de toma de posesión que si Euskadi se hiciera independiente quedaría "fuera de la Unión Europea" porque actualmente "es Europa a ser España".

Acusó al Partido Nacionalista Vasco de querer llevar "a la crispación, a la ruptura y a la división" al País Vasco con su proyecto independentista. A su juicio, el objetivo de ese "delirio" es "heredar" los votos de Batasuna y afirmó que "si ETA dura más de la cuenta es porque cuenta con el encubrimiento y los balones de oxígeno de Arzalluz e Ibarretxe". "El PNV no quiere jugar en el lado de los demócratas, quiere situarse donde siempre han estado los que han tratado de romper las reglasde juego", añadió.

A pesar de las amenazas de la organización terrorista ETA y de su último comunicado, en el que apunta como objetivo militar a los actos y las sedes de PP y PSOE, Iturgáiz señaló que los populares vascos "no nos vamos a echar ni un milímetro hacia atrás en nuestras posiciones, nuestra moral está más alta que nunca y no vamos dejar de trabajar por el Estatuto y la Constitución en esta tierra de España que es el País Vasco".

Definió a Batasuna como el "comando parlamentario" de ET en la Cámara de Vitoria y defendió la aplicación de la Ley de Partidos para ilegalizar a la coaliación abertzale. A su juicio, ese paso significará "cortar la lengua" a la banda armada pero instó a seguir trabajando en la lucha antiterrorista hasta "cortar la cabeza a la serpiente", en referencia al anagrama de la organización terrorista.

HOMENAJE A LAS VICTIMAS

El presidente del PP vasco rindió un intenso homenaje a las víctimas del terrorismo y aseguró que "nunca jamás" olvidará a los Gregorio Oróñez, José Luis Caso, José Ignacio Iruretagoyena, Miguel Angel Blanco, Manuel Indiano y todos los demás militantes populares que han muerto en las últimas décadas por el terrorismo. Agradeció a todos los militantes vascos su trabajo diario en el partido a pesar de las "incomodidades, incomprensiones y dificultades" y les invitó a seguir dando lecciones a algunos "iluminados" nacionalistas.

El portavoz popular en el Parlamento vasco, Leopoldo Barreda, reivindicó el derecho de Euskadi a "seguir haciendohistoria común con España" como respuesta al plan soberanista de Juan José Ibarretxe. Apostó por la ilegalización del brazo político de ETA a través de la Ley de Partidos con el eslogan "a menos ETA, a menos Batasuna, más libertad", lo que, según dijo, significa al mismo tiempo "más valores democráticos y mayor dificultad del nacionalismo" para alcanzar sus objetivos independentistas.

Por su parte, el presidente de la Diputación de Alava, Ramón Rabanera, advirtió al "lehendakari" de que mientras el Patido Popular gobierne esta provincia será la "muralla" al proyecto de soberanía que presentó en la Cámara de Vitoria y sobre la que pretende dialogar con el resto de las formaciones políticas para su puesta en marcha.

Un gran número de dirigentes del Partido Popular en toda España quisieron arropar a los militantes del País Vasco en su congreso, entre ellos, el presidente del Gobierno y del PP, José María Aznar; el presidente del PP de Asturias, Ovidio Sánchez; el presidente del PP de Aragón, Gustavo lcalde; el secretario general del PP de La Rioja, Conrado Escobar; el coordinador nacional de Estudios y Programas, Eugenio Nasarre; el secretario de Programas, Agustín Conde; intelectuales como Vidal de Nicolás, portavoz del Foro Ermua, y Carlos Martínez Gorriarán, portavoz de ¡Basta Ya!; la presidenta de la Fundación Miguel Angel Blanco, María del Mar Blanco; y empresarios como Roman Knörr, presidente de Confebask.