PAIS VASCO. AZNAR EXHORTA A LOS EMPRESARIOS VASCOS A NO PAGAR EL IMPUESTO REVOLUCIONARIO

BILBAO
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, José María Aznar, pidió hoy a los empresarios vascos que no paguen el impuesto revolucionario a ETA porque tienen la obligación de hacer frente a "una realidad de violencia terrorista, de presión ambiental, de coacción, de chantaje".

Aznar hizo esta reflexión en Bilbao durante su discurso de clausura de la Primera Conferencia sobre Cooperación Interregional, organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APPD), a la que han sistido 00 empresarios de primera fila y de pequeña y mediana empresa. Entre los asistentes figuraban el copresidente del BBVA, Francisco González, y el presidente de Iberdrola, Iñigo Oriol, junto con los presidentes de las comunidades autónomas de Cantabria, José Joaquín Martínez Sieso; de La Rioja, Pedro Sanz; de Navarra, Miguel Sanz; y de Castilla y León, José Luis Herrero.

También estaba invitado el "lehendakari", Juan José Ibarretxe, pero el Gobierno vasco, al igual que la Diputación Foral de Vizaya, excusaron su asistencia por considerar que las jornadas eran un acto electoralista a favor del PP.

A la misma hora en que Aznar intervenía en el Palacio Euskalduna, en una sala contigua del edificio Ibarretxe asistía como invitado a unas jornadas sobre cooperativas vascas.

BOICOT AL EMPRESARIADO

En su discurso, Aznar no ha hecho referencia a la ausencia del "lehendakari", pero sí ha criticado el "boicot" nacionalista al empresariado, al referirse a los "obstáculos" con los que se ha enfrenado la APD a la hora de organizar esta primera conferencia.

El jefe del Ejecutivo dijo que lo que está en juego en las elecciones del próximo 13 de mayo "no es la prevalencia de una u otra opción política, ni de uno u otro modelo empresarial o de desarrollo económico o de integración europea. Están en juego las condiciones previas que en una sociedad democrática hacen posible que las opciones políticas, los modelos de desarrollo, las políticas públicas, se contrasten libremente en las instituciones y n la sociedad".

Aznar cree que todos los que hacen explícito el compromiso con la sociedad vasca tienen que "alejar la tentación de resignarse". "El País Vasco" añadió, "es una sociedad que tiene derecho a acceder a las oportunidades que se le abren, sin otro temor que el de permanecer en una situación en la que la libertad, la ley, los derechos fundamentales, la convivencia y la tolerancia signifiquen cada vez menos, tengan un valor cada vez más relativo, se vuelvan cada vez barreras más débiles frene a la violencia y a la imposición".

El presidente del Gobierno afirmó que es muy consciente del esfuerzo que esta situación va a hacer recaer sobre las espaldas de los ciudadanos, entre ellos muchos empresarios, pero precisó que "son tiempos de renovar y de fortalecer nuestra apuesta por el País Vasco y su futuro".

Aznar señaló que cree estar en el "camino correcto", que pasa por la movilización social, por la "concentración de nuestras energías cívicas para hacer que los que retrocedan sean losque amenazan, los enemigos del futuro de paz y de bienestar al que este pueblo tiene derecho".

"Con ello", insistió, "queremos y podemos garantizar un País Vasco en la pluralidad constitucional de España, con un entorno social y empresarial de libertades firmemente defendidas, capaz de trabajar por el bienestar de los ciudadanos. Un País Vasco que sea el proyecto de éxito al que puede aspirar".

AZNAR DEFIENDE EL CONCIERTO

Por otro lado, el presidente del Gobierno ha hecho referencia a las negocaciones que están llevando a cabo en este momento los Ejecutivos central y vasco para renegociar el Concierto Económico. Aznar defendió el Concierto como "elemento central y básico del régimen propio del País Vasco".

A su juicio, los 20 años de vigencia del actual concierto "constituyen un período fructífero sin el cual no se explica el desarrollo del autogobierno del País Vasco". Dijo, además, que es de "lamentar" que el Concierto, en lo que significa de acuerdo y vínculo, "siga siendo manipulado com munición política por el nacionalismo".

Aznar pidió que se haga un "ejercicio de coherencia y de responsabilidad política" a la hora de abordar esta renegociación del nuevo Concierto Económico. Dijo que él ha acreditado ya su respeto por la institución y afirmó que su compromiso es el de "impulsar una negociación que, desde esas premisas, satisfaga las expectativas de los ciudadanos vascos y asegure su futuro desde la garantía constitucional que le corresponde".

(SERVIMEDIA)
30 Mar 2001
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