Aznar compareció este mediodía en rueda de prensa, acompañado del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, y el presidente de Portugal, Antonio Guterres, durante el II Foro Formentor sobre Seguridad en el Mediterráneo, desarollado en la localidad mallorquina de Formentor.

El jefe del Gobierno español defendió la necesidad de constituir cuanto antes una comisión internacional de verificación e los sucesos que están teniendo lugar, bajo el auspicio de Naciones Unidad, y la adopción de medidas urgentes con el fin de parar el actual enfrentamiento.

"Hay que evitar cualquier tipo de provocación", afirmó Aznar, "que perturbe la situación y no hay que dejar en manos de ningún grupo radical de ningún signo la iniciativa política".

A este respecto, incidió en la necesidad de "ajustarse claramente a la legalidad internacional, al respeto estricto del cumplimiento de los compromisos acordadosa la sólida voluntad de no desperdiciar el capital acumulado en tantas iniciativas y esfuerzos que se han hecho por el camino hacia la paz".

Preguntado sobre la posición de España en este conflicto, señaló que "he manifestado mi posición favorable a que, en razón de los acontencimientos de los últimos días, se establezca una comisión de verificación al amparo de lo que es la autoridad del secretario general de la ONU, en la cual debe haber representantes estadounidenses, israelíes, palestinos, europes y personalidades del mundo árabe".

"Es obligado -apuntó- un llamamiento muy firme a todo cese de violencia, a la recuperación clara e inmediata de la tranquilidad y a la retirada de las fuerzas y la utilización de las mismas en todos aquellos puntos en los cuales no se deriven de un acuerdo internacional específico".

DIALOGO

Agregó, sobre este particular, que "es necesario retomar con urgencia el diálogo al más alto nivel posible y retomar el camino del proceso de paz. Es importante aprovecha todas las oportunidades, ya que es verdad que vivimos un momento de dificultad pero también es verdad que nunca se ha estado tan cerca de resolver los problemas más importantes que nunca antes se habían podido abordar".

En relación con las acciones que podría adoptar la comunidad internacional, Aznar afirmó que tanto desde la UE como desde Estados Unidos "hacemos todos los esfuerzos necesarios para intentar contribuir a que la situación se reconduzca".

"A lo largo de los últimos días", explicó, han sido muchas las conversaciones que hemos tenido tanto con el presidente Arafat como con el primer ministro Barak, en el marco de unos contactos que han sido muy intensos".

En este sentido, reiteró que "es importante llegar cuanto antes a una determinación de esa comisión de verificación internacional, que tiene que trabajar con suficientes garantías y que tiene que tener esa composición plural a la que me he referido".

Concluyó Aznar aseverando que "nunca se ha estado tan cerca de llegar a un solución estable", al tiempo que puntualizó que "es lógico que cuando se está tan cerca del final existan problemas, porque estamos en el meollo fundamental, que no son sólo problemas territoriales, sino que se hunden en la historia y en creencias religiosas".

Por su parte, el primer ministro portugués, Antonio Guterres, calificó los sucesos en Jerusaén de "irracionales" y urgió a las partes "a pararlos" cuanto antes.

"Lo que está pasando en Palestina", enjuició, "no es importante sólo para el poceso de paz en Medio Oriente, es, además, un factor de inestabilidad para toda la cuenca del mediterráneo. Es necesario, por tanto, parar lo que está aconteciendo, ya que la pérdida de vidas humanas no tiene ninguna razón".

ACUSACIONES

En su intervención, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, atribuyó de nuevo al Gobierno de Israel la responsabilidad de la presencia de un importante contingente militar en Jerusalén durante la visita del ex ministro de Defensa Ariel Sharon lo cual ha sido el detonante del actual conflicto. Aclaró Arafat que el no acusa a Barak de lo sucedido, "lo único que hago es la descripción de la realidad".

A su juicio, "somos nosotros los que aguantamos los golpes y las pérdidas, cuando, ahora mismo, sentado aquí, me llega la noticia de que tres niños acaban de morir y ya son 113 mártires y los heridos son más de 2.800".

"Es necesario", aseveró, "parar estas matanzas contra el pueblo palestino y esto no se puede realizar sólo con una comisió internacional".

Preguntado sobre la reciente evacuación de las tropas israelíes de la tumba de José, Arafat dijo que en efecto ello se ha producido como respuesta a una petición suya a Israel en los últimos días.

Sin embargo, precisó que "se supone que se ha de cumplir lo que también se acordó en París sobre la retirada de todos los tanques de las entradas de las ciudades palestinas".

"(Lo de la tumba de José) es un buen paso, pero nosotros queremos que Jerusalén sea una ciudad abierta paraque acudan todos los seguidores de todas las religiones y efectúen sus rezos en esta ciudad sagrada".