ORGANIZACIONES ECOLOGISTAS PIDEN QUE SE REGULE LA INSTALAION DE VALLADOS EN FINCAS DE CAZA

MADRID
SERVIMEDIA

La Coordinadora de Organizaciones de Defensa Ambiental (Coda), que agrupa a más de 160 organizaciones ecologistas, ha elaborado un informe en el que pide a la Administración que regule la instalación de vallados cinegéticos, para evitar los impactos negativos que la alambradas causan sobre el medio natural.

Según el estudio de la Coda, las alambradas de casi dos metros de altura que se colocan rodeando las fincas de caza mayor para ipedir el paso de las especies cinegéticas es ya una práctica habitual en España.

La organización subraya como efectos más perniciosos de los vallados que originan la muerte por choque de numerosas rapaces y otras aves portegidas e impiden el paso a mamíferos silvestres, como linces y tejones.

El confinamiento de las especies cinegéticas provoca además la aparición de la endogamia, la colocación de cepos, lazos y otras trampas y la muerte por choque y enganche de ciervos y otras especies de caza myor durante la celebración de monterías.

Asimismo, la instalación de las alambradas obliga a desmontar amplias franjas de vegetación. Además, los vallados "usurpan" caminos públicos, cauces fluviales y vías pecuarias.

Los ecologistas califican como grave la tendencia actual de vallar un reducido número de hectáreas para mantener a ciervos o gamos que, al no disponer de suficiente espacio y pasto, deben ser alimentados por el hombre "como si estuvieran en un zoológico", para después cazarlos.

Denuncian también la colocación en los cotos españoles de vallas electrificadas, que, aunque son ilegales, son utilizadas como trampas para capturar en vivo jabalíes de los cotos colindantes, a pesar de que provocan numerosos accidentes que afectan a animales domésticos y hombres.

La Coda considera que la Administración debe impedir la colocación de nuevos vallados hasta que la aplicación de la nueva Ley de Conservación de la Flora y Fauna Silvestre obligue a instalar alambradas que no impidan el pasoa especies no cinegéticas y eviten riesgos de endogamia en las especies.

Los grupos ecologistas se oponen además a la colocación de alambradas en terrenos reducidos y promueven la apertura de pasos, la total erradicación de los vallados electrificados y la prohibición de que se celebren monterías en terrenos cercados.

(SERVIMEDIA)
27 Feb 1992
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