Consumo sostenible

La ONU, la UE y el Ministerio de Consumo presentan dos herramientas para “promover” el consumo sostenible

MADRID
SERVIMEDIA

El programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la Comisión Europea y el Ministerio de Consumo presentaron este jueves dos herramientas para “promover” el consumo sostenible y “ayudar a la ciudadanía a conocer cuál es el impacto ambiental de sus hábitos de vida”.

Ambas herramientas se presentaron en el marco del seminario ‘Pensar, comprar, actuar’, enmarcado en el ciclo ‘Diálogos por un Consumo Sostenible’ y son, por una parte, la Calculadora de Huella de la persona consumidora y la versión española de la web 'Manos a la acción' de la ONU.

La Calculadora de Huella de la persona consumidora permite calcular los impactos ecológicos del consumo personal y ha sido desarrollada por el Joint Research Centre (JRC) de la Comisión Europea.

Por su parte, la versión española de la web 'Manos a la acción' de la ONU impulsa “pequeños” cambios para desarrollar estilos de vida “más sostenibles”, según el Ministerio de Consumo, que puntualizó que ambos recursos están ya disponibles en su página.

Durante su intervención en el evento, en el que debatió con la periodista e investigadora Brenda Chávez sobre cómo generar un impacto positivo en la sociedad y en el planeta a través del consumo, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, dijo que sendas herramientas ayudarán a la ciudadanía a tener “información correcta” sobre el impacto de sus hábitos diarios de consumo así como a tomar “mejores decisiones” individuales y colectivas a la hora de comprar.

“Necesitamos partir de una información correcta que recoja toda la cadena de vida de un alimento o un producto, incluido el lado de la producción. Es importante explicar que, detrás de cada compra, hay un proceso invisible que, cuando sale a la luz, es cuando realmente tiene el poder de transformar nuestras decisiones del día a día”, defendió.

Garzón, que recordó que “todo suma” a la hora de reducir los impactos medioambientales del consumo y evitar el “colapso” del planeta, también incidió en la necesidad de ayudar a la ciudadanía en este aspecto con un etiquetado mejor tanto en la dimensión alimentaria como en la social y ecológica.

“Desde el Ministerio de Consumo estamos empujando en este sentido, porque estamos profundamente retrasados”, reconoció, consciente de que la información “que se da a veces es escasa y de poca calidad”.

El titular de Consumo también analizó, junto a la investigadora Brenda Chávez, cómo “convencer y seducir” a administraciones públicas, empresas y ciudadanía para que, con sus acciones, “transiten hacia la sostenibilidad global”.

En este punto, advirtió de que el paso a un modelo de producción y consumo sostenible es la única manera de asegurar una “sociedad del buen vivir”. “Esto choca siempre con los intereses del poder, pero se trata de preservar la vida humana y la del planeta, que es lo más importante”, resolvió.

(SERVIMEDIA)
20 Oct 2022
MJR/clc