La demanda tiene su origen en un estudio sobre el sector de alquiler de coches, en el que se vio la existencia de cláusulas abusivas para los clientes en los contratos, como hacerles firmar que reciben el vehículo en buen estado sin haber tenido ocasión de comprobarlo o reservarse la posibilidad de resolver el contrato unilateralmente.

Sgún OCU, las tres grandes compañías del sector -Avis, Europcar y Hertz- presentaron dichas cláusulas, pero mientras que las dos primeras las retiraron a requerimiento de la organización de consumidores, Hertz las mantuvo.

Otros aspectos abusivos en los contratos de alquiler de Hertz que denuncia OCU son la exoneración de responsabilidades por parte de la compañía en caso de imcumplimientos o negligencias, la imposición al cliente de la obligación de renunciar a sus derechos legales y la fijación de pealizaciones desproporcionadas al consumidor.

La organización de consumidores también denuncia que Hertz viene aplicando prácticas que califica de "inaceptables", como obligar al consumidor a pagar o contratar con tarjeta de crédito -sin aceptar el pago en metálico-, exigiendo la firma del cargo contra la tarjeta en blanco, sin rellenar todos los importes.

OCU afirma que espera una solución satisfactoria en los tribunales, mientras asegura que hay "dos grandes compañías en el sector que han llegad a un acuerdo con OCU y cuyos contratos son más interesantes para el consumidor", en referencia a Avis y Europcar.