LOS OBISPOS CONDENAN LA AMPLIACION DE LA DESPENALIZACION DEL ABORTO Y CRITICAN LA IMPRECISION CON LA QUE HA SIDO RECOGIDA

MADRID
SERVIMEDIA

Los obispos españoles condenan la ampliación de lo supuestos despenalizadores del aborto, calificado como "abominable crimen", y critican las "imprecisiones y vaguedades" con la que el Código Penal lo ha recogido, según el documento aprobado ayer por la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal.

En opinión de los obispos, los nuevos supuestos abren de par en par las puertas al aborto libre porque excluyen en la práctica toda protección jurídica al "nasciturus" durante las doce primeras semanas de vida.

La plenaria advierte que en la nueva reulación del aborto se observan "importantes imprecisiones y vaguedades", "que hacen materialemtne imposible una decisión objetiva por parte de jueces o tribunales sobre la concurrencia o no del supuesto en cada caso".

A juicio del más alto organismo de la Iglesia católica, la legislación española está influyendo en la conciencia del pueblo español, "que cada día ve más amenazada su capacidad para obrar correctamente conforme a lo verdadero y lo bueno por sí mismo", aunque no aseguran que ese sea el obetivo de tal legislación.

El documento asegura que aborto provocado es en sí mismo es una acción gravemente inmoral y "una violación del derecho fundamental a la vida, base de la convivencia entre los hombres y de la vida en sociedad".

La defensa de la dignidad humana y del derecho a la vida del no nacido es "algo absolutamente irrenunciable por parte del Estado, de lo contrario, "se mina la legitimidad moral y el fundamento mismo del Estado de derecho", asegura.

RECOMENDACION A LOS CATOLICOS Los obispos recuerdan a los católicos, que, como ciudadanos, tienen la obligación moral de poner todos los medios a su alcance para evitar que "este atentado contra la vida humana" llegue a ser una realidad.

Para ello, recomiendan a los miembros de la Iglesia que se comprometan "decididamente" en la defensa del no nacido frente a las leyes que favorecen el aborto.

"Nadie puede sentirse tranquilo", añade, "si no colobora en esta lucha pacífica en defensa de la vida humana amenazada. Es preciso,sobre todo crear unas condiciones de vida en las que el aborto ya no tenga lugar y solucionar los problemas que estén en la base de esta dolorosa situación".

Por lo que recomiendan: mejorar las condiciones económicas, promover una verdadera educación sexual, favorecer la adopción, apoyar el matrimonio y la familia, ayudar a las madres solteras, y crear instituciones de acogida a las madres en dificultados.

Por último, el documento asegura que la Iglesia no quiere agravar los sufrimientos ni herirlos sentimientos de nadies. "Lo que pretendemos es provocar un movimiento de reflexión y serenidad para que los problemas que se plantean en torno al aborto encuentren un camino de solución verdaderamente ético y social".

(SERVIMEDIA)
21 Nov 1992
EBJ