"Seguimos sin conocer esas razones, que no son estrictamente pastorales sino políticas, que ha tenido presente el nuncio, en su caso, y las autoridades eclesiásticas para nombrar como obispo de una diócesis a una persona ajena a lo que puede ser el ámbito vasco -no ya nacionalista ni abertzale-, lo que pueda ser su conocimiento de la realidad, la problemátic y la idiosincracia de este país. Respetando la decisión, en lo que se refiere a decisión política no será bienvenido", afirmó el portavoz del PNV.

Ricardo Blázquez, tras conocer su nombramiento al frente de la diócesis bilbaína, invocó a la Virgen de Begoña y deseó que su presencia no rompa el ambiente de convivencia. Dijo que quiere ser el obispo de todos y afirmó que hará todo lo posible por aprender euskera.

"Quiero adaptarme profundamente, sintonizar con la manera de ser y de sentir de este ueblo que es también ya mi pueblo, quiero también desde el principio, a través del estudio del euskera, mostrar mi deseo de insertarme en las pecualiaridades de este pueblo, que es mi pueblo; quiero ser obispo para todos", señaló.