Lo hizo en un comunicado en el que lamentó que haya vuelto a bajar la cifra de pacientes que iniciaron tratamiento contra la hepatitis C, situándose en “los niveles del peor momento de la pandemia”.

De este modo, explicó que entre enero y marzo de 2020, justo antes de la irrupción del coronavirus, un total de 3.125 personas comenzó el tratamiento contra esta enfermedad. Esta cifra hace palidecer a los 1.459 que lo hicieron entre julio y septiembre de 2021, un guarismo ligeramente superior a los 1.363 de los habidos entre abril y junio de 2020, en el peor momento de la crisis sanitaria.

Ante esta situación, la Aehve mostró su inquietud de que en el último trimestre de 2021 y el inicio de 2022, con una Atención Primaria “totalmente colapsada” por la sexta ola de la pandemia, la situación haya empeorado.

En ese sentido, el coordinador de Aehve, doctor Javier García-Samaniego, alerto de que “se están dejando de diagnosticar y empezar a tratar más de mil pacientes todos los meses, y eso es un problema muy serio, que demora el final de la eliminación de la hepatitis C en nuestro país, que teníamos al alcance de la mano”.

Luego de exponer que entre un 25% y un 30% de los enfermos que se diagnostican actualmente tienen una enfermedad hepática avanzada, auguró que, “de continuar esta ralentización, el diagnóstico de enfermedad hepática avanzada por el virus de la hepatitis C aumentará”.

El doctor Javier García-Samaniego recordó que los datos del Estudio de Monitorización de Efectividad Terapéutica SITHHepaC impulsado por el Ministerio de Sanidad ponen de manifiesto la “alta eficacia” de los tratamientos para la hepatitis C.

Por ello, instó a las autoridades competentes a que “arbitren las medidas necesarias para desbloquear la derivación de pacientes de Atención Primaria a Atención Especialización” y para reactivar “los programas de microeliminación para pacientes en entornos vulnerables de centros de adicciones, drogas, inmigrantes, personas sin hogar que tienen un circuito asistencial diferente, que también se están viendo afectados por la pandemia”.

Por último, el doctor Javier García-Samaniego afirmó que se asiste a “una oportunidad histórica de acabar con la hepatitis C, pero la sensación en este momento es que lejos de avanzar para acercarnos a este objetivo, estamos retrocediendo”.