Así lo apuntó durante su discurso tras tomar posesión de su cargo tras salir elegido alcalde de la ciudad condal con el apoyo del PP y los Comunes, lo que hizo insuficiente el pacto entre Junts y ERC para hacer alcalde a Xavier Trias.

Collboni remarcó que es un “honor” aceptar el reto más importante de su vida y prometió que trabajará durante los próximos cuatro años “siempre en beneficio de la ciudad y la ciudadanía”.

A este respecto, indicó que "la soberanía recae en todos los concejales” del Consistorio e insistió en que quiere ser el alcalde “de todos”. “Es mi voluntad honesta e irrefutable”, asevero.

El nuevo alcalde socialista auguró que “tenemos un camino apasionante” por delante y se dirigió al resto de partido políticos recalcando que “cuento con todos a pesar de las diferencias”.

Además, el primer edil barcelonés comentó que la puerta de la Alcaldía de la ciudad condal “estará siempre abierta” y apuntó que “incluso para la extrema derecha”. De este modo, “la ciudad avanzará”.

Durante su discurso, Collboni fijó como compromisos iniciales "recuperar y reforzar la relación entre los barceloneses y el Ayuntamiento y dotar a los barceloneses de un nuevo Gobierno que responda de la manera más fiel posible a lo que han reflejado en las urnas, de una manera transversal”.

Por último, “frente al tirano que amenaza a Europa”, en referencia al presidente ruso, Vladimir Putin, el nuevo alcalde quiso mostrar su “apoyo, afecto y solidaridad” con los ciudadanos de Ucrania. “Barcelona estará siempre a vuestro lado”, concluyó.