NISSAN Y SUZUKI. ANFAC APRUEBA LA POSTURA DEL GOBIERNO
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El director general de Anfac, Enrique Fernández Laguilhoat, manifestó hoy a Servimedia que la crisis que viven empresas como Santana Motor, Nisan Ibérica y Ebro-Kubota es un reflejo de la grave situación que en este momento está pasando la industria de automoción en España y en Europa.
Para Fernández Laguilhoat, aunque parece que hay síntomas de que puede haber una recuperación de la economía, "nosotros desgraciadamente todavía no la hemos sentido. Los datos que tenemos de ventas en enero y febrero nos indican que estamos aún muy lejos de haber salido del hoyo".
Respecto al papel que debe jugar el Gobierno para impedir que Suzuki, Nissn y otras empresas japonesas cierren factorías instaladas en nuestro país, Fernández Laguilhoat indicó: "Yo creo que lo que el Gobierno está haciendo. Está estudiando al máximo todas las posibilidades que la legislación comunitaria permite en este momento".
"Yo no creo que el Gobierno esté dejando ni una sóla de las oportunidades que pueda tener, lo que pasa es que hace falta que se lleguen a acuerdos que hagan viables las empresas. Ahí es donde está la gran dificultad", explicó el responsable de la ptronal de fabricantes de vehículos.
Fernández Laguilhoat está convencido de que "todo el mundo está haciendo un esfuerzo extraordinario, las empresas, los trabajadores y el Gobierno, para ver de qué manera puede elaborarse un proyecto que permita que estas empresas sean viables, porque lo que no se puede hacer es buscar soluciones puramente paternalistas y que a los seis meses no haya solución".
Respecto a las ayudas públicas que piden algunas empresas japonesas para mantener sus factorías en nuetro país, Fernández Laguilhoat recordó que el Gobierno está limitado por la normativa comunitaria y "hay que respetar las reglas de la competencia".
MEDIDA "DRAMATICA"
El presidente de Anfac considera que el cierre de factorías como la de Santana Motor en Linares, la de Kubota en Madrid o las de Nissan en Madrid y Avila sería "muy grave" para España, especialmente en el momento de crisis que vive el país. Añadió que, además, para determinadas regiones esta medida sería "dramática".
A pesar de qe en los últimos días han sido los inversores japoneses los que han anunciado el desmantelamiento de sus empresas en España, Fernández-Laguilhoat cree que no es sólo un problema de los japoneses, sino que todos los fabricantes de vehículos en general, que atraviesan muchas dificultades como consecuencia de la crisis.
Fernández Laguilhoat insistió en que, además de buscar soluciones particulares a cada una de estas empresas en crisis, es necesario adoptar medidas para que el sector cobre confianza en e futuro. "Hay que reactivar de alguna manera la demanda interna, que la tenemos terriblemente deprimida", indicó.
Entre las medidas que, a su juicio, permitirían reactivar la demanda de vehículos destacó la eliminación del impuesto de matriculación, la reducción de los tipos de interés, la mejora de las infraestructuras y la flexibilización del mercado de trabajo.
(SERVIMEDIA)
09 Mar 1994
NLV