Hasta el momento no ha habido ningún nadador con paraplejia en el mundo que haya logrado atravesar las frías aguas del que está considerado como el Everest de la natación de larga distancia.

Cimadevila tiene previsto volar hoy desde Vigo a Madrid, donde embarcará rumbo al aeropuerto londinense de Heathrow. Allí le esperará una ruta por carretera de unas dos horas, con destino final en Dover, en el extremo sudoriental de Gran Bretaña.

El intento de Cimadevila trascurrirá aproximadamente por encima de la ruta del Eurotúnel. Comenzará en la playa de Shakespeare, entre Dover y Folkestone, y, si se cumplen las previsiones, concluirá en Cap Gris Nez, a mitad de camino entre Calais y Boulogne.

Su aventura se iniciará cuando lo estime oportuno el piloto que contratará y que le orientará sobre la marea, la climatología y otros detalles para llevar a buen puerto el recorrido.

A partir de mañana, Cimadevila entrenará en la costa británica, que conocerá por primera vez después de haber estado preparándose en las aguas de la ría de Pontevedra, similares en cuanto a temperatura.

La idea de cruzar a nado el Canal de la Mancha le rondó por la cabeza a Cimadevila el pasado mes de septiembre, a principios de la temporada de natación que concluirá en breve.

Inicialmente, Cimadevila pretendía "conseguir un objetivo para este verano con una buena base aeróbica, de resistencia, antes de afrontar el Mundial", que se celebrará en Durban (Sudáfrica) a finales de noviembre y primeros de diciembre.

Además, intentará "demostrar a la sociedad y, sobre todo, a mí mismo, que si uno se esfuerza sin esperar nada a cambio, puede conseguir cosas extraordinarias. Todos en algún momento de nuestra vida tenemos que superar nuestro propio Canal de la Mancha. Yo sólo trato de ayudar a que todo el mundo crea en lo imposible", declaró el nadador a Servimedia.

Con el fin de que su marca tenga validez, Cimadevila se ha hecho socio de la Asociación Cruzar el Canal (CSA), que certifica los logros de los nadadores y consigue permisos a guardacostas de Inglaterra y de Francia.

HISTORIAL

Pablo Cimadevila, nacido el 12 de diciembre de 1978, quedó parapléjico con cuatro años después de que un coche le atropellara en la puerta de su casa.

Después de este accidente, entró en el Hospital Nacional de Parapléjicos, en Toledo, donde permaneció un año y descubrió la natación.

Su progresión y cualidades para este deporte le llevaron pronto a la competición, con el Campeonato de España disputado en El Ferrol en 1990, donde logró una medalla de bronce nadando contra deportistas que le doblaban en edad.

Ese mismo verano fue convocado por la selección nacional en el Mundial Junior que se celebró en Stoke Mandeville (Gran Bretaña), donde obtuvo la medalla de bronce en su prueba favorita, los 200 metros estilos.

Los éxitos siguieron llegando y en 1998 se proclamó campeón del mundo en el relevo 4x50 estilos y subcampeón en los 400 libres.

En 2000 consiguió probablemente el mayor éxito de su carrera deportiva: la medalla de oro de los 200 estilos en los Juegos Paralímpicos de Sidney.

Ahora, compagina los entrenamientos con su trabajo en una empresa de diseño y fabricación de joyería y tiene la mente puesta también en los Juegos Paralímpicos de Pekín 2008.