Laboral

El mundo registró en el tercer trimestre de 2022 un déficit de 40 millones de empleos en comparación con las cifras prepandemia

- La OIT avisa: “Ya ha comenzado a producirse una profunda desaceleración del mercado

Madrid
SERVIMEDIA

La cantidad de horas de trabajo en el tercer trimestre de 2022 fue un 1,5% inferior al nivel registrado en el cuarto trimestre de 2019, antes de la pandemia, situación equiparable a un déficit de 40 millones de empleos a tiempo completo.

Así lo pone de relieve el Observatorio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre el mundo del trabajo’, cuya décima edición se publicó este lunes, y en la que este organismo internacional alerta de que, “a tenor de las tendencias actuales, cabe prever una gran disminución del nivel de empleo a escala mundial para el cuarto trimestre de 2022”.

Este organismo considera que, pese a que generalmente “es necesario un cierto periodo de tiempo para que una desaceleración económica o una recesión dé lugar a una reducción del nivel de empleo y ello provoque desempleo, los datos de que se dispone ponen de manifiesto que ya ha comenzado a producirse una profunda desaceleración del mercado de trabajo”.

El informe destaca el buen comportamiento del mercado de trabajo a escala global con el inicio de este año, aunque la situación ha ido empeorando a consecuencia, principalmente, de la guerra en Ucrania y el alza de la inflación. De este modo, en el primer semestre de 2022, la proporción empleo-población registrada en la mayoría de las economías avanzadas era equiparable o superior a la que se daba antes de la crisis generada por la pandemia de covid-19, si bien en los países de ingresos medianos para los que se dispone de datos seguía existiendo déficit de empleo con respecto a la coyuntura anterior a la pandemia.

De los datos disponibles se desprende que la situación de los trabajadores altamente cualificados (directivos, profesionales y técnicos y profesionales conexos) en el segundo trimestre de 2022 había mejorado más que la de los profesionales de cualificación baja o media, en particular en los sectores de los servicios y las ventas, que sigue siendo peor que la registrada en el mismo trimestre de 2019.

En concreto, a comienzos de 2022, la cantidad de horas de trabajo a escala mundial se recuperaba a un ritmo “muy rápido”, especialmente en las ocupaciones de mayor cualificación y con respecto a las mujeres.

No obstante, esa recuperación se vio impulsada por un aumento del empleo informal, que puso en riesgo la tendencia a la formalización que venía dándose desde hace quince años. La situación se agravó a lo largo del año y, según la OIT, en el tercer trimestre de 2022 la cantidad de horas de trabajo fue un 1,5 por ciento inferior al valor registrado antes de la pandemia, lo que representa un déficit de 40 millones de empleos a tiempo completo.

MÚLTIPLES CRISIS

Según el estudio de la OIT, "en 2022 han confluido múltiples crisis que se han visto agravadas por el conflicto bélico de Ucrania y sus efectos adversos indirectos, que afectan profundamente al mundo del trabajo".

Este organismo explica que esos efectos se manifiestan a través de la inflación en el precio de los alimentos y la energía, la reducción del salario real, el aumento de la desigualdad, la disminución de la cantidad de medidas políticas que pueden aplicarse y el aumento de la deuda en los países en desarrollo. “La desaceleración del crecimiento económico y de la demanda agregada conllevará asimismo una disminución de la demanda de empleo, ya que la incertidumbre y las expectativas menos halagüeñas inciden adversamente en el nivel de contratación”, abunda la OIT.

POLÍTICAS EXAUSTIVAS

El director general de la OIT, Gilbert F. Houngbo, considera que, "con objeto de hacer frente a esta situación tan adversa del empleo a escala mundial, y evitar una gran recesión del mercado de trabajo en todo el mundo, será necesario aplicar políticas exhaustivas, integradas y equilibradas a escala nacional e internacional".

"Debemos utilizar un amplio conjunto de instrumentos políticos, entre los que cabe destacar la intervención en el precio de los bienes públicos, la reorientación de beneficios extraordinarios, el fortalecimiento de la seguridad en materia de ingresos mediante protección social, el aumento de las ayudas para garantizar ingresos y la orientación de ayudas a las personas y las empresas más vulnerables”, ahonda el director de este organismo.

UCRANIA

El estudio de la OIT alerta del efecto que la invasión rusa está teniendo en el mercado laboral de Ucrania, donde este año habrá 2,4 millones de empleos menos que antes de la invasión. Con todo, la pérdida de puestos de trabajo es inferior que la cifra prevista por la OIT inicialmente, debido a que ahora hay zonas que no están tan afectadas por el conflicto de forma tan directa. Asimismo, avisa de que solo el 28% de los refugiados ucranianos encuentra empleo (asalariado o autónomo) en su país de acogida).

Además, este organismo señala que los efectos del conflicto afectan a los mercados de trabajo de países limítrofes, lo que podría dar lugar a una desestabilización política y del mercado de trabajo en esos países.

En zonas más lejanas, en Asia central y en el resto del mundo, el conflicto produce un aumento de los precios y una mayor fluctuación de los mismos, así como un aumento de la inseguridad alimentaria y un agravamiento de la situación de pobreza.

(SERVIMEDIA)
31 Oct 2022
DMM/gja