La proposición de ley plantea el reconocimiento en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos del derecho a la percepción del subsidio por accidente de trabajo o enfermedad profesional, desde el día siguient al de la baja.

Además, propone la equiparación de la acción protectora entre el Régimen Especial de los Autónomos y el General, para que estos trabajadores puedan tener las mismas garantías y protección que los asalariados en caso de enfermedad.

En la exposición de motivos, la Fundación Internacional de la Mujer emprendedora recuerda que en España hay actualmente más de tres millones de inscritos como autónomos, la mayor parte de ellos dedicados a pequeñas empresas de servicios, de comercio, o tabajando en la producción de bienes y servicios para grandes empresas.

Pese a ser trabajadores por cuenta propia, los autónomos desarrollan su labor con los mismos inconvenientes y riesgos que pueda correr un asalariado. Aunque su cotización es menor a la del Régimen General, insisten, su nivel de protección es, proporcionalmente, mucho más reducido.

Así, los autónomos carecen de protección en caso de baja por enfermedad, no tienen derecho a la prestación por desempleo, y sus prestaciones en casode jubilación son mucho menores a las de quienes han cotizado al Régimen General.