Según las mismas fuentes, el estado de salud de Rosa Zarra era en las últimas horas muy grave, lo que ha provocado que no reaccionara a las técnicas de reanimación que los médicos le practicaron tras sufrir la parada cardiaca.

La mujer fue alcanzada en el estómago, según testigos presenciales, por un pelotazo de goma lanzado por las fuerzas de seguridad en los incidentes ocurridos junto a la Paloma de la Paz, lugar en el que los manifestantes de HB atacaron a los concentrado en favor de la libertad del industrial José María Aldaya.

Al parecer, Rosa Zarra fue trasladada al hospital nada más recibir el impacto y posteriormente fue dada de alta. Sin embargo, debido a los fuertes dolores que le aquejaban, tuvo que ser ingresada de nuevo el día 26 y operada del intestino.

El pelotazo, que le impactó de lleno en el abdomen, le reventó el intestino grueso, lo que le causó una grave peritonitis, que se vio agravada por su condición de trasplantada de riñón.