Magaña, que sustituyó el pasado 26 de marzo a Alfonso Escámez al frente de CEPSA, sufría serios problemas de salud, a causa de un cáncer pulmonar que le obligó a ser internado hace casi un año en un hospital de Houston (EEUU), donde fue sometido a un fuerte tratamiento intensivo de tres semanas, que le permitió volver a su actividad emprearial normal.

El empresario sufrió el pasado fin de semana un infarto que agravó el delicado estado de salud del que venía reponiéndose, por lo que fue ingresado en la Clínica Ruber, sobreviniéndole algunas complicaciones que le causaron la muerte en la mañana del lunes.

Luis Magaña fue nombrado en 1975 director general de la Energía con el Gobierno de la Unión de Centro Democrático (UCD), con quien también desempeñó la labor de comisario de la Energía y Recursos Minerales del Ministerio de Indusria.

Fuentes de Cepsa han señalado a Servimedia que el consejero delegado y vicepresidente ejecutivo de la compañía, Carlos Pérez de Bricio, recibió la noticia en China, en donde se encontraba con motivo de sus responsabilidades en la petrolera, y emprendió el regreso inmediato a Madrid, ya que deberá hacerse cargo de las riendas de la compañía en tanto se convoca en las próximas semanas un consejo extraordinario.

También en el BCH, entidad financiera históricamente vinculada a la petrolera, ha povocado consternación la noticia de la muerte de Magaña, en el que el banco y el resto de accionistas significativos (Elf Aquitaine y Endesa) habían depositado su confianza para recoger el testigo de Alfonso Escámez, que hace menos de un mes dejó el puesto.

Por su parte, fuentes de Endesa, accionista de Cepsa y de Fecsa, indicaron a Servimedia que la noticia ha caído "como un jarro de agua fría" sobre el equipo que preside Feliciano Fuster.