Montero ahondó en la idea del marco constitucional en el que se escuda el PSOE cada vez que se pregunta a un dirigente del partido como del Ejecutivo por si tiene cabida una amnistía, como piden fuerzas independentistas catalanes para negociar la investidura de Pedro Sánchez, dentro de la Constitución.

Así lo hizo cuando se le preguntó por dicho encaje en la sede de UGT en Asturias en unas declaraciones en las que remarcó que desde el Ejecutivo quieren llevar a cabo “un proceso que permita seguir trabajando por una convivencia fluida en nuestro país, que permita el diálogo, el entendimiento y alejarnos de una política de confrontación que se ha practicado por parte de unos y otros en este país”.

“Por eso, es obligado para cualquier gobernante, establecer ese compromiso por la convivencia”, dijo Montero, máxime ahora que se inicia una nueva legislatura. Además, reiteró que “hoy Cataluña está mejor que en 2017 porque el presidente Pedro Sánchez tenía una clara vocación de intentar articular entendimiento, consenso, diálogo entre los que pensamos distintos”.

“Venimos diciendo que para el PSOE el objetivo es la convivencia y no hay otro instrumento para ello que el diálogo sobre todo cuando estás en las antípodas y tenemos el marco de la Constitución. Siempre la Constitución es el paraguas”, para que todos estén “en el mismo terreno de juego”.

En este sentido, la ‘número dos’ del PSOE comentó que desde su partido no han cambiado en la “necesidad del diálogo” mientras que reconoció que “evidentemente, cada grupo político se expresa de una manera”.

“Lo que no se comprende es la posición del PP, cuando se reúnen con Junts todo es admisible, ético y legal” pero cuando el PSOE intenta mantener diálogo, es un "traidor a España”, denunció la ministra en funciones.

BANDAZOS Y GUERRA

En esta línea Montero criticó los “bandazos” del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, aludiendo a las matizaciones que se realizan desde el PP a manifestaciones de su presidente que para la ministra responden a la “falta de rumbo” de esta formación por el “miedo” de Feijóo a la “crítica interna” y a su “falta de programa político” porque “no sabe qué contestar, qué hacer respeto a los grandes retos del país”.

Por otra parte, la vicesecretaria general sostuvo que, a la espera de la investidura “fallida” de Feijóo, “el PSOE, con discreción, sigue trabajando para articular esa mayoría de un gobierno progresista con un entendimiento de forma plural”. Defendió que van a “seguir desarrollando” lo ya emprendido pero que “hoy por hoy, trabajo, prudencia discreción y Constitución”, remachó.

Por último, preguntada por las palabras de Alfonso Guerra criticando la posición del Ejecutivo y del PSOE, la ministra se limitó a responder que le tiene “cariño y respeto” al que fuera dirigente de su partido y vicepresidente del Gobierno, pero evitó algún comentario más.