La última peregrinación de este año la protagonizó la Archicofradía del Apóstol Santiago, y durante la ceremonia religiosa monseñor Tagliaferri impuso al arzobispo de Santiago, Antonio María Rouco Varela, y a los miembros del cabildo catedralici la medalla de esta archicofradía.

Rouco Varela fue el encargado de colocar, en la tarde del viernes, la primera piedra para tapiar la Puerta Santa, en una ceremonia solemne en la que intervino como delegado regio el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga.

Tras una misa de Acción de Gracias, el arzobispo encabezó la comitiva que salió por la Puerta Santa a la Plaza de la Quintana. Posteriormente la comitiva volvió a entrar en la catedral por otra puerta.