El atentato se produjo cuando las dos hermanas acudían a celebrar el sacramento de la eucaristía en el barrio de Bab-El Ued de Argel, durante el día en el que la Iglesia católica celebra en todo el mundo el Dómund, jornada dedicada a las misiones.

En principio, las monjas son consideradas mártires por el hecho de haber encotrado la muerte por el simple hecho de ser miembros de un credo religioso diferente al de los integristas islámicos, presuntos autres del atentado.

Por otra parte, el presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Elías Yanes, y el obispo secretario, monseñor José Sánchez, remitieron el lunes un telegrama de condolencia a la superiora de la Congregación de las Agustinas.

En el texto expresa su dolor y el de todos los obispos españoles ante el atentado contra las dos religiosas que trabajaban desinteresadamente en Argelia.