De estos, 1,8 cruzaron las fronteras con los países vecinos como refugiados y 2,5 millones son desplazados internos dentro de Ucrania, según informó Unicef en un comunicado.

“La guerra ha causado uno de los desplazamientos de niños y niñas a gran escala más rápidos desde la Segunda Guerra Mundial”, advirtió su directora ejecutiva , Catherine Russell. En su opinión, “este macabro hito puede tener consecuencias duraderas en las generaciones futuras".

Según la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, 78 niños han muerto y 105 han resultado heridos en Ucrania desde el comienzo de la guerra el 24 de febrero.

Estas cifras reflejan solo las informaciones que la ONU ha podido confirmar, apuntó Unicef, por lo que es probable que el saldo real resulte mucho mayor. Agregó que "la guerra también ha tenido devastadoras consecuencias en la infraestructura civil y en el acceso a servicios básicos".

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha registrado 52 ataques que impactaron en instalaciones de atención sanitaria en el país durante las últimas cuatro semanas, mientras que el Ministerio de Educación y Ciencia de Ucrania ha informado de daños en 500 centros educativos. Además, prosiguió, se estima que 1,4 millones de personas carecen de acceso a agua potable y que 4,6 millones tienen un acceso limitado.

Más de 450.000 niños de 6 a 23 meses necesitan apoyo alimenticio complementario y, según Unicef, ya se aprecia un descenso de la vacunación infantil ordinaria, incluidas las vacunas contra el sarampión y la polio.