Durante el ataque, producido en Beit Laniya, resultó herido otro paramédico que perdió un pie, y el conductor del vehículo, según informó hoy Intermón Oxfam.

La portavoz de Intermón Oxfam, Lara Contreras, afirmó que "este incidente demuestra que un ataque militar sobre las calles y callejones densamente poblados de Gaza va a producir un número considerable e inevitable de víctimas civiles".

"No hay ningún área que sea segura y los habitantes que han decidido abandonar la zona han visto cómo se les han impedido salir de la franja", añadió.

Intermón Oxfam aseguró que la ofensiva terrestre israelí, iniciada el pasado sábado y a la que le ha seguido un bombardeo por tierra, mar y aire, impide la entrada de medicinas, alimentos, agua y combustible que el millón y medio de palestinos que viven en la franja necesitan de forma urgente.

Contreras lamentó que "el elevado número de víctimas mortales y heridos ha saturado los hospitales. Se han agotado las medicinas y hay serias carencias de las piezas de recambio necesarias para que los equipos médicos funcionen correctamente".

Agregó que Oxfam Internacional y las organizaciones con las que trabaja se han visto obligadas a suspender todo su trabajo, excepto la asistencia sanitaria de emergencia.

"Muchos de nuestros colegas en Gaza están atrapados en sus hogares y temen por sus vidas y las de sus familiares. Otros, como nuestro compañero Arafa, han perdido la suya intentando salvar a otras personas".

Oxfam Internacional pidió al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas una resolución vinculante para todas las partes que exija un cese inmediato de la violencia en Gaza e Israel y que no se entorpezca la entrada a Gaza de ayuda humanitaria.

Además, hizo un llamamiento a la UE para que suspenda el acercamiento diplomático a Israel hasta que no se cumplan estas dos condiciones.