"Ha sido sin duda un ombre muy importante", declaró el ministro a la Cadena Ser. "Ha estado durante más de diez años regiendo los destinos de la abogacía española y por tanto su figura va a dejar sin duda una impronta muy marcada".

"Es un hombre que ha ejercido además el cargo con autoridad y con inteligencia y ha sabido, creo, cohonestar diferencias, contraprosiciones, y durante estos años ha hecho un modelo de colegio de abogados y un modelo de abogacía muy influenciado por su concepción de la misma", continuó. "Además,eso ha determinado también que haya desempeñado un papel importante, más allá del propio ámbito de los abogados, en el ámbito de los colegios profesionales".

Sin embargo, a juicio de Tomás de la Quadra, con el fallecimiento de Pedrol Rius no se puede decir que muera "un concepto de la abogacía que es sin duda permanente: el concepto de independencia del abogado respecto de los poderes fácticos y públicos y respecto de las presiones de otros colectivos, incluso de abogados".

"Junto a ello hay otr idea que también debe subsistir, que es la idea del abogado como servidor, como prestador de un servicio a la ciudadanía, y por lo tanto de un profesional que debe estar también en competencia con sus compañeros, para en esa competencia tratar de tener siempre un servicio mejor al ciudadano, que es el beneficiario último de los servicios que dispensa el abogado", concluyó el ministro de Justicia.