Según publica hoy el diario "El País", desde 1997 un millar de mujeres con este tipo de cáncer fueron ratadas con quimioterapia de alta dosis. Este método se basa en los resultados de un trabajo publicado en 1995 por el doctor surafricano Werner Bezwoda.

Sin embargo, expertos internacionales han comprobado ahora que el tratamiento es un fraude. El doctor Josep Baselga, jefe de Oncología del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, asegura que "Bezwoda se inventó los datos".

El doctor Baselga es coordinador científico del grupo Solti, un equipo de especialistas de quince hospitales españoles que ha relizado unos trescientos ensayos clínicos, sobre pacientes con cáncer de mama, con la técnica de quimioterapia de alta dosis.

El doctor Vicente Guillén, presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica, opina igual: "los ensayos de Bezwoda son falsos y no se puede inferir nada de ellos. España era uno de los países donde más se ensayaba con esta técnica, pero las sospechas sobre los resultados de Bezwoda ya han ralentizado los trabajos".

La investigación que ha revelado que Bezwoda se invent los ddatos no concluye que la técnica sea dañina para las pacientes, pero sí sostiene que no es beneficiosa.

Algunos especialistas españoles defienden que el tratamiento debe dejar de aplicarse, aunque son partidarios de que continúen los ensayos clínicos para obtener más datos sobre los efectos de la quimioterapia de alta dosis en este tipo de pacientes.

Algunas fuentes mantienen que hay clínicas privadas en España que siguen ofreciendo este tratamiento, cuyo coste asciende a unos nueve millone de pesetas. El alto precio de este sistema se debe a que el procedimiento implica un costoso autotrasplante de médula.