García explicó que tanto las oficinas de la ODS en Madrid como las distintas delegaciones de la organización, repartidas por la geografía española, se encuentran esta mañana atestadas de jóvenes que llevan horas haciendo cola para informarse de qué tipo de reclamación pueden efectuar.

La organización intentará atender lo mejor osible todas las reclamaciones que se presenten e insistió en que la ODS no tiene previsto impugnar el sorteo, a pesar de que lo hagan los partidos políticos de la oposición, que ya han expresado su deseo de que se repita.

El dirigente de la ODS aclaró que impugnar el sorteo supondría entrar en una "guerra" para demostrar que la organización es parte interesada, pero reiteró que colaborarán con todos aquellos que quieran recurrir su caso.