egún explicó a Servimedia Juan Rojas, secretario de la Federación de Comerciantes Ambulantes de la Comunidad de Madrid, aunque la intención de los congregados en la Plaza de la Villa era entregar un recurso en el registro del consistorio contra la subida fiscal, los agentes municipales que custodian el Ayuntamiento les impidieron acceder al interior del edificio.

No obstante, representantes de los comerciantes lograron mantener una entrevista con el primer teniente de alcalde, Luis María Huete, a quie expusieron el motivo de su protesta.

Los vendedores ambulantes de Madrid acusan al Ayuntamiento de querer erradicar la actividad económica que desarrollan mediante una fuerte presión fiscal, ya que, a su juicio, el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) subirá un 425 por ciento y las tasas sobre los mercadillos un 68,25 por ciento.

Así, con ese incremento impositivo, que entrará en vigor en 1992, el precio por una plaza de mercadillo pasará a costar de las 23.000 pesetas actuales a más de 40.00 pesetas, según Rojas. Esto, a juicio de este sector, es una estafa, ya que va en contra del compromiso electoral del PP de no subir los impuestos.

DE 15.000 A 72.000 PESETAS

Añadió que, además, por el IAE los vendedores tendrán que pagar al Ayuntamiento unas 72.000 pesetas, frente a las 15.000 que pagan en la actualidad.

Rojas, que calificó de satisfactoria la entrevista, indicó que en la reunión con el representante municipal éste se mostró a favor de la movilización que mantienen los comercantes ambulantes contra el IAE, ya que, al igual que ellos, está en contra de su aplicación.

Respecto a las tasas municipales, Huete se comprometió a facilitarles una entrevista con el concejal de Hacienda, Fernando López Amor, antes del pleno municipal del próximo día 10, con el fin de que los comerciantes ambulantes puedan exponerle los motivos de su oposición a esta ordenanza.

El portavoz de los vendedores ambulantes anunció que si esa entrevista no se produce antes de la fecha señalada, el coectivo volverá a convocar otra huelga general y acudirá al próximo pleno de la corporación para explicar los motivos de su protesta.

Rojas aseguró que los vendedores ambulantes rechazan la aplicación de la tasa sobre los mercadillos porque existe un error técnico en su imposición, ya que grava el desarrollo del trabajo de este colectivo durante todos los días del año, "mientras que nosotros trabajamos 52 días al año durante cinco horas, lo que es un agravio comparativo para este sector", añadió.

tro de los asuntos tratados en la reunión con Huete y al que éste accedió, fue la propuesta de este colectivo para elaborar un estudio y un proyecto de regulación de la venta ambulante en el municipio, en el que estaría contemplada la reivindicación de los comerciantes ambulantes para que se creen cuatro nuevos mercadillos en la capital.

Para ello, los vendedores mantendrán una reunión con el director de comercio, con el fin de explicarle los aspectos que consideran convenientes y para que el estudio ea elaborado consensuadamente con ellos.