Sin embargo, durante los próximos días llegarán las cigüeñas más tardías, hasta completar las más de 17.000 parejas que se instalarán en España esta temporada.

La mayoría e estas aves llegan de Africa, donde han pasado parte del invierno, si bien cada vez son más las cigüeñas, alrededor de 10.000, que no abandonan España en invierno para desplazarse al continente africano.

Según Fernando Barrio, experto de la Sociedad Española de Ornitología (Seo/BirdLife), esto es debido a la facilidad que les brindan los vertederos de residuos sólidos urbanos para encontrar alimento durante todo el año.

Tanto a las que emigran como a las más sedentarias les vale cualquier soport para instalar sus nidos. Estas aves, acostumbradas a la presencia humana, se han adaptado a los cambios registrados en los últimos años en la orografía española, y junto a la tradicional imagen del nido de cigüeña instalado en la torre de una iglesia es fácil ver nidos en antenas, torretas de alta tensión e incluso en los paneles indicadores situados sobre la transitada carretera N-V, que une esa comunidad con Madrid, donde una pareja lo ha instalado por segundo año consecutivo.

AUMENTO DE POBLACION

La población española de cigüeña blanca ha experimentado una notable recuperación durante los últimos años, convirtiéndose en una de las más importantes de Europa. Las comunidades que registran los censos más espectaculares son Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura y Madrid, así como el área del Ebro.

El último censo de la Sociedad Española de Ornitología sitúa en 17.000 el número de parejas reproductoras, pero esta cifra podría aumentar en los próximos años al haberse registrad tanto en 1996 como en 1997 una meteorología favorable para la cría.

En cualquier caso, la actual población reproductora es ya hoy superior a la que existía a finales de la década de los cuarenta, lo cual constituye una situación casi excepcional entre las distintas especies de aves.