Según informó el comisionado general de Unrwa, Philippe Lazzarini, este viernes, “el ataque de hoy a uno de los pocos centros de distribución de esta organización que quedan en la franja de Gaza se produce cuando los suministros de alimentos se están agotando, el hambre es generalizada y, en algunas zonas, se está convirtiendo en hambruna”.

De hecho, añadió, “todos los días compartimos las coordenadas de todas nuestras instalaciones en la franja de Gaza con las partes en el conflicto. El ejército israelí recibió ayer las coordinadas, incluidas las de esta instalación”.

Desde que comenzó la guerra hace cinco meses, Unrwa ha registrado “un número sin precedentes de violaciones contra su personal e instalaciones que supera cualquier otro conflicto en el mundo”, añadió la organización.

Así, al menos 165 miembros del equipo de Unrwa han sido asesinados y más de 150 instalaciones de esta ONG fueron alcanzadas, algunas totalmente destruidas, entre ellas muchas escuelas y más de 400 personas fueron asesinadas mientras buscaban refugio bajo la bandera de la ONU.

Por lo tanto, remarcó Lazzarini, “las Naciones Unidas, su personal, sus instalaciones y sus bienes deben estar protegidos en todo momento. Desde que comenzó esta guerra, los ataques contra instalaciones, convoyes y personal de las Naciones Unidas se han convertido en algo común, lo que es un flagrante desprecio del derecho internacional humanitario. Pido una vez más una investigación independiente sobre estas violaciones y la necesidad de rendir cuentas”.