Los préstamos se concedieron a personas con dificultades para acceder a la financiación bancaria tradicional y se dividieron entre microcréditos sociales, con un importe medio de 13.277 euros, y microcréditos financieros, con una cantidad media de 11.661 euros.

Desde su creación, en junio de 2007, y hasta el pasado mes de febrero, se han financiado un total de 29.876 proyectos con 228 millones de euros, de los que 165 millones todavía están en cartera.

Para acceder a estos microcréditos, los emprendedores deben presentar un proyecto de negocio viable que genere ingresos suficientes para atender el pago del crédito y suponga una estabilidad laboral para el solicitante.

El importe máximo por microcrédito es de 25.000 euros y deberá ser destinado a las inversiones a efectuar. Estos préstamos tienen un plazo de devolución de entre uno y 5 años, y un periodo opcional de carencia de hasta 12 meses.