Con motivo del Día Mundial de la Salud, que hoy se celebra bajo el lema "Mujer y embarazo", la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), insiste en la necesidad trabajar desde los diferentes sectores sociales para evitar los embarazos no deseados, sobre todo en adolescentes, a tenor de la alta incidencia creciente de gestaciones de este tipo en España.

En un comunicado de semFYC, los médicos de familia señalan que "podemos aprovechar la consulta para dar información a los más jóvenes sobre la utilización de métodos anticonceptivos o la píldora postcoital".

Según la doctora Blanca Guitiérrez, coordinadora del Grupo de Atención a la Mujer de semFYC, es preciso implicar a los varones jóvenes y descartar la idea de que el embarazo no deseado es sólo responsabilidad de la mujer.

Para ello, debe mejorar la comunicación entre los distintos profesionales que están en contacto con adolescentes como son los profesores y los trabajadores sociales. En las últimas décadas en España se ha producido una verdadera revolución social con la liberación de la mujer.

Las etapas de gestación y de lactancia cuentan con el respaldo legislativo en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (1995) modificada recientemente por ley para promover la conciliación familiar y laboral de las trabajadoras (1999).

La gestación es un proceso fisiológico que precisa de unos cuidados mínimos que son similares a los que se requieren en otros momentos de la vida. De hecho es muy importante que las mujeres embarazadas sigan unos hábitos de vida básicos como son:

- Una alimentación variada y rica en productos naturales.

- Beber entre uno y dos litros de líquido al día.

- Realizar ejercicio físico de forma regular y adaptado al embarazo.

- Evitar el consumo de alcohol, drogas y, sobre todo, de tabaco.

- Prevenir las enfermedades infecciosas según las recomendaciones vigentes, con especial atención a las mujeres inmigrantes cuyo estado vacunal puede ser desconocido.

- Si la mujer tiene pareja estable, ésta debe implicarse en todo el proceso.

El médico de familia debe asumir su papel a la hora de asesorar a la mujer sobre las distintas opciones disponibles en cuanto a métodos anticonceptivos y sobre el uso, en caso necesario, de la píldora postcoital.

semFYC destaca también cómo la violencia contra las mujeres, tanto la física como la psicológica, se hace especialmente patente durante el embarazo o tras el parto.