Para ello, informó el Cgcom este martes, el acuerdo contempla la realización de acciones de carácter formativo y divulgativo que trasladarán a la población la importancia de mejorar los espacios que habitamos y la calidad de los mismos para mejorar la salud.

Así, de manera preventiva, se pretende evitar que los efectos del cambio climático afecten en la menor manera posible a la población: el 80% de los determinantes sociales que influyen sobre la salud están fuera del sistema sanitario, y de estos, el 25% que condiciona nuestra salud vienen marcados por los entornos que habitamos y la situación de las ciudades, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Entre estos condicionantes destaca el envejecido parque de edificios. De hecho, en España, el 80% de este parque edificado tiene más de 20 años, con cerca de 10 millones de viviendas susceptibles de ser rehabilitadas, lo que lo convierte en el más envejecido de Europa.

En este sentido, los expertos señalaron que las carencias del mismo quedaron patentes durante la pasada pandemia de covid19 en cuestiones como accesibilidad y funcionalidad.

SOSTENIBILIDAD

Además, no solo los edificios deben responder a estas necesidades, ya que el planeamiento urbano tendría que dar las mismas respuestas en materias de salud, promoviendo zonas verdes y espacios preparados para mitigar los efectos del calentamiento global, favorecer la accesibilidad, la movilidad sostenible y la cohesión social.

De hecho, el presidente del Cgcom, el doctor Tomás Cobo, manifestó la implicación de la profesión médica en todas aquellas acciones que contribuyen a mejorar las condiciones de salud de las personas y de la sociedad en su conjunto.

“Desde la organización somos conscientes de que el cambio climático es la principal amenaza para la salud durante los próximos años, por eso pusimos en marcha a nivel nacional y europeo la Alianza Médica Contra el Cambio Climático. Acuerdos como el suscrito hoy nos van a permitir desarrollar acciones que pongan la salud en el centro de todas políticas, transformar la sociedad y hacerlo siempre bajo un enfoque One Health”.

Por su parte, la presidenta del Cscae, Marta Vall-llossera, valoró la oportunidad que supone esta alianza entre arquitectos y médicos: “El derecho a la salud implica medidas sanitarias y medidas sociales, que, de forma indisociable, conectan con el derecho a una vivienda digna, adecuada y de calidad y a disfrutar de entornos urbanos saludables, seguros y sostenibles”.

A esto añadió que “en apenas tres años hemos vivido una crisis derivada de una pandemia y los efectos del cambio climático son evidentes. Los desafíos que afrontamos son múltiples y complejos. Solo cabe trabajar de la mano para conseguir pueblos y ciudades que prioricen la salud de las personas, apostando por la calidad de nuestro entorno construido”.