De los pacientes que consultan al médico, más de la mitad están mal diagnosticados y de los que están diagnosticados, más del 60% no está correctamente tratado, asegura la FEEN.

Según los expertos, la falta de información sobre la enfermedad provoca el abuso y automedicación con fármacos no específicos, lo que repercute en la falta de control de la enfermedad e incluso puede convertir en crónicas las migrañas.

La mayor incidencia de la migraña se produce en la banda de edad en la que la persona es más productiva (entre los 25 y los 45 años), pudiendo ocasionar una significativa disminución del rendimiento laboral.

Los estudios realizados permiten afirmar que cada paciente migrañoso pierde una media de entre 6 a 12 días de trabajo al año. Respecto al impacto laboral, se calcula que la migraña es responsable de la pérdida de hasta 13 millones de jornadas anuales.

Proporcionar mayor información y el uso de un tratamiento específico para el control de la migraña permitiría cambiar este escenario, según ha puesto de manifiesto el mayor estudio realizado hasta la fecha en España para evaluar el impacto de la migraña en el ámbito laboral.

La migraña es un desorden neurológico consistente en un dolor de cabeza (cefalea) primario que afecta a algunas personas de manera repetitiva en el tiempo. Aunque sus causas exactas todavía hoy se desconocen, se sabe que el factor hereditario es importante.