En el turno de réplicas, dijo al líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, que los acuerdos en La Moncloa limitan el alcance a CiU, "los demás libremente pueden hacer lo que quieran, y todo lo que sumen, bienvenido sea, pero hagan algo, porque de momento ustedes, que yo sepa, no consiguen nada más".

"A pesar de estos discursos tan inflamados, Cataluña no ha avanzado a base de ese tipo de discursos", prosiguió, "sino a base de quienes saben combinar ideales y realismos". Recalcó que "el acuerdo tiene cimientos más sólidos que el desacuerdo, que en este momento nos llevaría a la parálisis", y pidió "coherencia" a los representante de ERC porque "es decepcionante que cantaran las maravillas de este proceso antes de enero y ahora hablan del desastre", como consecuencia del "orgullo herido y celos excitados".

En su respuesta al líder del PP, Mariano Rajoy, le acusó de ambicionar "el palacio y el poder", pero hay que ser conscientes, aún en la oposición de que "en el oasis es donde se construyen mejor las cosas y se está mejor, porque es donde se sirve mejor a la gente".

RAJOY, "EL GRAN CRISPADOR"

El presidente de ICV, Joan Saura, opinó que Rajoy es "el gran crispador del Estado español" como lo fuera en su momento José María Aznar, porque "detrás de su ironía se esconde un intento de degradar, despreciar, ridiculizar, considerar como una locura el Estatuto del Parlamento catalán".

Insistió en que ICV-IU no quiere ninguna ruptura, sino avanzar hacia el Estado federal, y el Estatuto acordado "refuerza" las relaciones de Cataluña con el Estado, por lo que pidió al PP "que rectifiquen, no de la discrepancia política, pero sí de ser responsables de la crispación en algunos sectores".

Por su parte, la vicepresidenta de los socialistas catalanes, Manuela de Madre, también arrmetió contra el líder del PP, a quien reprochó que utilice "chascarrillos" y no "argumentos".