Aunque se han diagnosticado cerca de medio cententar de diferentes tipos de alteracines del sueño, las más habituales son el insomnio y las que afectan a la respiración, si bien algunas causas de los trastornos del sueño son de índole ambiental o tienen su origen en los malos hábitos o en la ingestión de hipnóticos o de alcohol

Otras alteraciones menos frecuentes son la narcolepsia, que se manifiesta a través de ataques súbitos e irresistibles de sueño, el "síndrome de piernas inquietas", que consiste en contracturas musculares periódicas de las piernas durante el sueño, y la somnolecia diurna de origen desconocido.

Según la Separ, muchos de los problemas para descansar por las noches están relacionados con el estilo de vida actual en los países desarrollados. Si bien en España se han impuesto horarios de trabajo europeos, muchas personas continúan acostándose tarde. La televisión también contribuye a ello, al programar espacios o películas que resultan atractivos para los telespectadores en horarios casi de madrugada. También tiene una influencia destacada el estrés.

Otra d las irregularidades asociadas al sueño que destaca la Separ son los ronquidos, ya que en España aproximadamente la mitad de los hombres y cerca de un tercio de las mujeres roncan casi a diario.

En ocasiones, los ronquidos se acompañan de interrupciones de la respiración, que pueden, según su severidad y duración, causar problemas de salud. Los especialistas se refieren a esta disfunción con la denominación de Síndrome de Apnea del Sueño (SAS).

Un estudio realizado en Vitoria sobre una muestra de1.100 varones de 30 a 70 años reveló que el 7% de ellos padecía el citado síndrome. Entre las mujeres, el porcentaje es bastante menor -aproximadamente la mitad que en los hombres-, aunque las diferencias tienden a igualarse a partir de la menopausia.

En los casos en los que los trastornos de sueño sean leves, la Separ recomienda no tomar alcohol ni café, sobre todo después de las cinco de la tarde, y evitar las comidas copiosas antes de acostarse. Respecto a la siesta, recomienda no alargarla más de 0 o 45 minutos, porque si son excesivamente largas pueden tener un efecto contraproducente sobre el ritmo del sueño nocturno.

Los especialistas recomiendan que los casos de insomnio crónico sean tratados siempre por el médico. Aunque en algunos casos los facultativos recetan hipnóticos, advierten que no conviene automedicarse ni acostumbrarse a ellos, por los problemas de dependencia que generan y las dificultades para su supresión.