Cuidados

La Atención Integral y Centrada en la Persona como modelo de cuidados se basa en “una persona, un plan” y da "resultados excelentes"

- El sistema fue auspiciado por Fundación Pilares y Lares hace tres años

VÍDEO: los clientes de Servimedia disponen de imágenes y sonido de estas declaraciones en el enlace https://servimedia.tv/TotalesProyectoAICPcom

MADRID
SERVIMEDIA

El proyecto de Atención Integral y Centrada en la Persona, Aicp.com, auspiciado hace tres años por Fundación Pilares y Lares, se basa en la metodología de “una persona, un plan” y sus resultados están siendo “excelentes”.

Así se puso de manifiesto durante el diálogo sobre el ‘Proyecto Aicp.com: actuaciones innovadoras para avanzar en el cambio de modelo de cuidados', celebrado en Servimedia, que fue moderado por su director general, José Manuel González Huesa, y en el que participaron la directora de AICP.com y presidenta de Fundación Pilares, Pilar Rodríguez; el coordinador del proyecto para domicilios y comunidad, José Castaño; y la coordinadora para residencias, Mercedes Lera.

En el transcurso de su intervención, Pilar Rodríguez explicó que el objetivo del proyecto, que comenzó a implantarse hace tres años, es “poner, de verdad, a las personas en el centro, escucharlas, comprender sus necesidades e intentar satisfacerlas siempre con ellas”.

“El objetivo es que las personas no pierdan el control de su vida, por mucha necesidad de cuidados que tengan. Y esto es fácil de decir, pero es difícil de conseguir y por eso estamos en un proceso que puede ser largo, pero sí se están poniendo las bases, desde hace más tiempo, pero con este proyecto más, de que vayamos cambiando la mirada hacia las personas mayores, que es el quid de la cuestión también”, prosiguió.

En este sentido, justificó la “unión” con Lares para llevar a cabo este proyecto en que el mismo tiene “una parte” de trabajo con los servicios comunitarios y también “un gran trabajo comunitario”, así como de trabajar un “sistema referencial de calidad” en residencias, por lo que juzgó “muy pertinente” que Lares fuese considerado como “un partner muy adecuado”.

CAMBIO RADICAL DEL MODELO

Tras agradecer que el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 haya “confiado” en ambas entidades para desarrollar este proyecto que supone un “cambio de modelo”, gracias a los Fondos Next Generation, la responsable del mismo subrayó que el gabinete de Pablo Bustinduy “aboga” en su nueva estrategia estatal de cuidados de larga duración por un “cambio radical de modelo”, convencida de que “el elemento esencial es la transformación”.

A este respecto, puntualizó que el modelo que intentan “aplicar” y están “desarrollando en diferentes ámbitos” pretende “mostrar evidencia científica de que obtiene resultados positivos en las personas, profesionales, familias y sistemas de protección social”.

“Es una atención integral, que considera todas las dimensiones de las personas y sus necesidades y cómo los recursos se tienen que adaptar a esas necesidades y, por otra parte, está centrado en las personas. La persona es el centro, la persona, digamos que dirige el cuidado que necesita, porque se trata de su vida”, detalló, al tiempo que reivindicó que el hecho de encontrarse en una situación de dependencia “no nos obligue a depender, en el peor sentido de la palabra, de otros y que otros tomen decisiones por nosotros sobre nuestra vida”.

Se trata, a su entender, de “un asunto, quizá, de una honda raíz ética y filosófica”, al entender que el “antiguo” modelo “asistencialista” hace “daño a las personas”. “Las desarraiga de su lugar, de sus costumbres, de sus deseos”, prosiguió, para explicar que la idea es volver “la mirada hacia la persona, querer escucharla de verdad, practicar la empatía de verdad y recoger de ella cómo le gustaría seguir viviendo con los apoyos que necesita, pero sin apartarnos de la idea de que el objetivo es que ella pueda levantarse cada día pudiendo hacer elecciones y sintiendo que la vida merece la pena”.

INTEGRALIDAD

En este punto, defendió que la “integralidad” que propone este sistema requiere de recursos, pero también “de cómo están previstos los recursos, de cómo están las leyes, porque, si, según la ley de la promoción de autonomía personal, las prestaciones entre sí son incompatibles, no se puede hacer una atención integral, porque la persona a lo mejor necesita de varias a la vez para poder permanecer en su casa”.

“Y, por parte de las personas que están en la residencia, si la ley persiste como está y también la atención a personas con discapacidad como está, es difícil modificar las condiciones de todo tipo, arquitectónicas, de profesionales o de sistemas de atención que hay en los centros”, continuó, al tiempo que estimó “importante” también “cambiar el esquema del modelo” de manera que “el ámbito normativo y el diseño de los propios recursos cambie” para que pueda “realmente” llevarse a cabo la “transformación” del modelo y que “llegue a las personas de una manera adecuada, coordinada e integrada”.

En esta línea, admitió que la “coordinación” entre administraciones es “un gran problema” del ámbito de los cuidados y, “en general, de la dependencia” y vio “necesario reivindicar el mayor protagonismo de la administración local”.

“Mejorar la gobernanza del sistema es una condición inexcusable para que realmente la transformación por la que estamos abogando sea posible y, por supuesto, la financiación”, apostilló, al tiempo que urgió a “contextualizar en cada realidad, con flexibilidad, en qué marco se desenvuelve la vida de la persona”, para lo cual “hay que hacer una serie de actividades y de cambios y, por supuesto, escuchando siempre a la persona”.

MIRAR A LOS SERVICIOS Y LAS PERSONAS

Rodríguez manifestó que se trata, “por una parte, de mirar a los servicios y, por otra, mirar a las personas”, algo que ambas organizaciones han hecho mediante la aplicación de una metodología de gestión de casos que consiste en “conocer bien a la persona, generar vínculos de confianza con la persona”, a la que se “acompaña” en su proceso de precisión de cuidados, al tiempo que la persona que hace la gestión “conoce los recursos y procura que lleguen de manera coordinada a la persona”.

“Luego tiene el trabajo comunitario, porque los recursos de la comunidad es un cofre lleno de tesoros, donde hay un montón de recursos, muchos gratuitos que no se aprovechan, se aprovechan mal o se duplican”, lamentó, para, a continuación, incidir en que el sistema se basa en la idea de “una persona, un plan” en el marco de una “constelación” de recursos “fragmentados y descoordinados”.

Por lo que respecta al despliegue del proyecto, explicó que, en estos tres años, se ha llevado a cabo un “largo proceso de acuerdo” con autonomías, ayuntamientos y residencias para que “colaboraran” y empezar a trabajar en este “proceso de cambio, con un proceso de acompañamiento al cambio”.

Consciente de que la “transformación” que implica “es muy profunda”, confesó que resulta “muy gratificante” que los resultados “están siendo excelentes”.

“Hemos hecho una experiencia cuasi experimental trabajando con instrumentos de valoración estandarizados, rigurosos, con una muestra de personas con las que trabajamos y otra muestra control y se han visto cambios verdaderamente importantes a mejor en la calidad de vida de las personas, en reducción de la soledad, en mejora de su funcionalidad, en reducción de sobrecarga de las familias y mejora de las viviendas”, abundó, al tiempo que reconoció que están “muy satisfechos” de lo conseguido hasta ahora.

A su vez, afirmó que, en las residencias, ha sido un proceso “complejo y difícil” el de “cambiar la mirada para encontrarnos con la persona de verdad y no ver las necesidades y los recursos, sino ver quién es, qué necesita en ese momento de su vida y cómo lo puedo ayudar”.

TRANSFERENCIA

Por último, aseveró que también se ha trabajado en un proceso de “transferencia” para “devolver” a comunidades autónomas, ayuntamientos y a la Administración General del Estado “todo lo realizado con los productos conseguidos”.

“Porque hay muchos productos que van a continuar apoyando a esas administraciones a que sigan un poco por esas líneas que se han trabajado”, agregó, al tiempo que puntualizó que, “salvo” que se les “encomiende continuar”, las dos organizaciones impulsoras cierran el proyecto de tres años y lo han “transferido” a las administraciones y residencias para que “continúen” este trabajo, dado que, en solo tres años, es “imposible” alcanzar un “cambio de modelo” que requiere de un trabajo “largo y difícil, pero posible”.

(SERVIMEDIA)
17 Dic 2024
MJR/gja