Los organizadores esperan que sean más de 50.000 jóvenes los que acudan en este año jubilar a la convocatoria jacobea. Con el fin de acilitar la presencia de los jóvenes de países del Este, se ha creado un fondo de compensación, que se nutrirá de una cuota de 1.000 pesetas que deberán abonar los miembros de las diócesis que acudan al evento.

Para albergar a todos los jóvenes que participan en la peregrinación, la comisión organizadora cuenta con el camping de Bando, con capacidad para 30.000 personas, residencias religiosas y plazas en los albergues de la Xunta de Galicia.

Además, alrededor de 200 voluntarios, pertenecientes ala Federación de Asociaciones Diocesanas e Interdiocesanas y a distintas parroquias de Galicia, participarán en un plan destinado a acoger, orientar e informar a los visitantes desde su llegada a la ciudad compostelana.

La peregrinación se presenta como pórtico y preparación de la Jornada Mundial de la Juventud que se celebrará en Denver (EE.UU.), y a la vez como cauce de participación para muchos cristianos que no podrán cruzar el Atlántico.

Los peregrinos serán recibidos el día 29 de julio en l Plaza del Obradoiro por el arzobispo de Santiago, Antonio María Rouco Varela, que también presidirá la celebración litúrgica. El acto de recepción se cerrará con una fiesta en el complejo del Monte do Gozo.

Bajo el lema "Construir la cultura de la vida", el día 30 se dedicará a la reflexión sobre el mensaje que el Papa lanzará durante el VIII Encuentro Mundial de la Juventud.

Los actos de reflexión penitencial y un concierto sobre los derechos humanos centrarán la penúltima jornada, mientras queel 1 de agosto se clausurará el encuentro y se elegirá a los representantes de la peregrinación que acudirán a Denver.