El portavoz del PP en la Comisión Mixta de la Unión Europea, Guillermo Martínez Casañ, manifestó a Servimedia que el conflicto diplomático que mantienen los dos países desde que Marruecos llamó a consultas a su embajador por tiempo indefinido puede solucionarse durante la presidencia de los Quince.

"El Gobierno de España está haciendo uso de su influencia al frente de la Unión Europea para favorecer cualquier tipo de acción que tenga como destinatario al Reio de Marruecos", confesó. "Lo único que pretendemos es que comprendan que nuestro único interés es tener una relación privilegiada con ellos".

CARTA A MOHAMED VI

Incluso, el propio presidente del Gobierno, José María Aznar, envió recientemente una carta al Rey de Marruecos, Mohamed VI, para proponerle su participación en la creación del Banco Euromediterráneo, uno de los proyectos que pretende impulsar durante la presidencia española en la UE.

Al igual que al resto de los jefes de Estado y de Gbierno de los países del Mediterráneo, Aznar le explicó en su misiva los beneficios que puede tener para Marruecos la creación de un organismo que canalice y financie el desarrollo de los países del área sur del Mediterráneo.

Además, la Presidencia española tiene previsto organizar una reunión de los Quince en Marruecos para estudiar el problema de la inmigración y la continua llegada ilegal de africanos a Europa.

"Nosotros no podemos hacer más de lo que hacemos", exclamó Martínez Casañ. "Seguimo esperando a que Marruecos se dé cuenta de que todo esto es un malentendido un cambien su postura". El signo inequívoco que anhela el Partido Popular es la vuelta a España del embajador marroquí.

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ya anunció, a su regreso del viaje a Marruecos, a mediados de diciembre, que el representante diplomático volvería a España el 1 de enero de 2002. Sin embargo, han pasado más de dos semanas y la crisis permanece abierta.

Esto demuestra, según l portavoz del PP, que la visita oficial de Zapatero "no sirvió para nada" y que él tiene "muy poca influencia" en todo este asunto. "Josep Piqué ya auguró que era una falta de oportunidad y que no valdría para nada", apostilló.