En el mismo número el presidente del Banco Central Hispano, José María Amusátegui, advierte del peligro de que los bancos españoles "queden fuera de juego" respecto a los nuevos esquemas de negocio que plantee la unión monetaria si no se modifica la normativa bancaria y fiscal española.

Emiio Botín, presidente del Banco Santander pone el acento en el control de los costes como clave del éxito, y la canalización a través de las redes bancarias de los seguros, especialmente en el ramo de vida.

Papeles de Economía, publicación perteneciente a la fundación FIES, de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) dedica su número 54 al Sistema Financiero en 1993 con un "cartel" de colaboradores de lujo donde están "todos los que son": Raimundo Ortega, José Luis Leal, Enrique Fuentes Quinana, Braulio Medel, Francisco Luzón, Emilio Ybarra, Luis Valls, Jaime Terceiro, Josep Vilarasau, y otros significados personajes del sistema financiero.

El presidente del Banco Popular, Luis Valls, corrobora una impresión que está en el ambiente a tenor de los resultados de la banca en 1992: "el último ejercicio ha sido de desprestigio para el sector, por no saber medir las consecuencias de decisiones presentes o pasadas".

Cuestiones como la convergencia con Europa y la unión monetaria provocan oiniones matizadas. Así Emilio Ybarra, presidente del BBV considera que "la propia dinámica de los mercados y de la economía comunitaria está demandando, cada vez con más insistencia, una moneda única para toda Europa".

Braulio Medel, presidente de la CECA matiza que "la falta de confianza en el avance de la convergencia económica con Europa puede convertirse en una rémora para salir de la crisis".

Papeles de Economía resume en cinco mensajes los criterios a tener en cuenta en el desarrollo del sitema financiero durante 1993 comenzando por el marco general que plantea el necesario avance hacia la unión económica y monetaria eruopea.

El siguiente argumento alerta sobre la "comprometida situación" de las entidades bancarias y la necesaria búsqueda de nuevos criterio de gestión y organización.

Tras ello, una llamada a la superación del divorcio entre economía real y sistema financiero, y la necesidad de un equilibrio entre libertad y regulación.

En cuarto lugar se pone de manifiesto el reciente endeudamiento de la economía española y la necesidad de ahorro. En este sentido, se recuerda que la Deuda Pública ha pasado de representar el 12,9 por cien del PIB en 1975, al 46,5 por cien de finales de 1992.

Como factor final, se pone de manifiesto la necesidad de obtener una mejor rentabilidad de la inversión real, en un contexto de retroceso de esta rentabilidad.