Montero lo pidió en Fuengirola, en su intervención en un acto de campaña del PSOE para las elecciones andaluzas, donde pidió a Feijóo responsabilidades por lo que García Urbano bromeó. "No he metido la mano donde no debiera. Ha sido un accidente doméstico, tampoco tiene que ver con la violencia de género", ironizó el alcalde de Estepona.

Montero tachó de “intolerable” que el actuar líder de la oposición, el señor Feijóo, “no quiere saber nada, no quiere opinar de nada, no se ha enterado de nada, nada de nada”. En su opinión, “esto no son bromas, esto es que uno tiene incorporado… que no ha aprendido qué es lo que ocurre con la violencia de género”.

“Es un insulto al trabajo de todos los días, al miedo que todavía sufren muchas mujeres cuando escuchan la llave de casa o cuando saben que hay algún problema”, censuró, antes de aludir a la Ley de Libertad Sexual y denunciar que “no hay manera de que una ley que tiene que ver con esos derechos sea apoyada por la derecha”.

Acto seguido, vinculó el incidente con el protagonizado hace semanas por el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, quien espetó a una procuradora socialista de las Cortes regionales con discapacidad que él le iba a contestar “como si fuera una persona normal”. Según la ministra, después de este comentario Núñez Feijóo también rehusó reconvenir al vicepresidente y dirigente de Vox.

“Oiga, que no son bromas, que esto no tiene gracia sobre la discapacidad”, le echó en cara Montero. “Señor Feijóo, queremos una condena firme por la violencia de género y por la integración de la discapacidad. Condene a los que se saltan esas reglas éticas”. Este emplazamiento al líder popular le sirvió para concluir que PP y Vox “son lo mismo”.