La gran pantalla ha sido escogida como el mejor medio de difusión de ideas para llegar al mayor número posible de personas. De ahí que el Consejo de Europa presente en la sala "Odyssèe", en Estrasburgo, nueve películas que, por su contenido social, optarán a dos premios del "Año Europeo de la Ciudadanía a través de la Educación".

La primera película que se emitirá será "Mar adentro", de Alejandro Amenábar, que refleja el derecho a morir dignamente. Las otras películas son "Le Couperet", de Costa Gavras, en la que se cuenta la historia de un hombre en paro tras la deslocalización de la empresa para la que trabajaba.

"Eleni", de Théo Angelopoulos, es la primera cinta de una trilogía que narra la historia del siglo pasado en la que queda reflejada desde la Revolución de Octubre hasta la Primera Guerra Mundial.

"Paradise Now", de Hany Abu-Assad, presenta la historia de dos amigos palestinos designados para cometer un atentado en Tel Aviv. Ambos se ven vinculados por un contrato moral que no pueden o no quieren romper.

"Va, Vis e Deviens", de Radu Mihaileanu, nos lleva al año 1984, en el que miles de africanos procedentes de 26 países azotados por la hambruna se encuentran en Sudán. Una madre cristiana obliga a su hijo de nueve años a hacerse pasar por judío para salvarle la vida. Integración, racismo y amor filial quedan reflejados en esta producción.

En "Le Domaine Perdu", de Raoul Ruiz, un hombre rememora sus vivencias en Londres en los años cuarenta, y en "Dogville", de Lars von Trier, aprendemos que la bondad de las personas puede ser relativa y los favores pueden costar muy caros.

"No Man's Land", de Danis Tanovic, nos sitúa en la guerra de Bosnia en 1993, vista desde la perspectiva de dos beligerantes. Finalmente, "Yazi Tura", de Ugur Yücel, refleja los estragos de la violencia en el comportamiento de dos jóvenes que, tras quedar heridos durante el servicio milirar, deciden escoger caminos muy diferentes: uno el suicidio, otro el asesinato.