Explicó que la compañía estatal está siguiendo una estrategia que persigue desmantelar el sector en Canarias y en España para instalarse en el extranjero, con vistas a "la liberalización inminente del mercado de tabaco en el mundo, y en este sentido está incrementando su actividad en otros países, donde la mano de obra es mucho más barata".

Según Hermoso, Tabacalera ha mantenido una actitud hacia sus fábricas en las islas Canarias "co la que no estamos de acuerdo". Se refirió asimismo a la venta de la participación que la multinacional Philips Morris tenía en la fábrica tinerfeña de Tacisa, filial de Tabacalera, por un importe total de 100 pesetas, después de recibir por parte del Ejecutivo canario subvenciones y ayudas para que continuaran con su porcentaje, el 50%.

Manuel Hermoso desveló que, cuando intentaron convencer a la multinacional americana para que no abandonara la fábrica, éstos argumentaron "que ellos no se iban a guso, sino que casi los estaban echando".

Criticó también el desvío de dinero de Tabacalera al sector servicios, en concreto a la construcción de un hotel de gran lujo en el sur de Tenerife, en perjuicio de inversiones en el sector tabaquero, "la única industria importante que tenemos en las islas". A su juicio, es "ilógica" esta inversión, cuando por otro lado "quieren despedir a los trabajadores de Tacisa alegando dificultades económicas".