Según ha explicado el ministro de Sanidad y Consumo, José Manuel Romay Beccaría, a lo largo de los últimos diez años la incidencia de la lepra en España ha ido disminuyendo progresivamente, pasando de una media anual de 21 casos a tan sólo 3 el pasado año.

Sin embargo, en otros muchos países, la lepra todavía es un problema sanitario y social. Según señala la doctora María Neira directora de Erradicación y Eliminación de Enfermedades Transmisibles de la Organización Mundial de la Salud (OMS), durante 1998 se detectaron más de 800.000 casos nuevos de los que el 15% afectaron a niños.

La doctora Neira apela a la "responsabilidad" que tienen los países desarrollados de acabar con la lepra, ya que se trata de una enfermedad que está ligada a la pobreza, que tiene un diagnóstico fácil y para la que existe un tratamiento eficaz. En este sentido, el mensaje que da la doctora Neira on vistas al Día Mundial contra la Lepra es que "es posible eliminar la lepra".

ULCERA DE BURULI

Por otra parte, y también con motivo de esta celebración, el director de la Ong ANESVAD, José Ignacio Castro, ha advertido de la existencia de una nueva enfermedad, la úlcera de Buruli, que presenta unos síntomas similares a la lepra pero que, además, no tiene curación si no es a través de la estirpación o mutilación de los miembros afectados.

"Se desconoce la forma de contagio y no responde a los atibióticos, por lo que la única forma de tratarla es mediante intervenciones quirúrgicas costosas y fuera del alcande para los países que lo sufren", principalmente del Africa Occidental.

En concreto, en Costa de Marfil, donde se registraron los primeros casos, su incidencia ha pasado de 12 casos en 1985 a cerca de 20.000 en el año 2000. Las previsiones cifran en 40.000 el número de enfermos para el año 2004.

Ante esta realidad, ANESVAD quiere alertar a la sociedad sobre esta nueva enfermedad. "Hy que atajarla", aseveró Castro, primero para curar a los afectados en Costa de Marfil y después para evitar que se extienda al resto del mundo.