En la Comunidad de Madrid son obesos 10 de cada 100 hombres y 15 de cada 100 mujeres, y 40 personas adultas de cada 100 toman más alimentos de los que necesitan, según datos de la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de la CAM.

Aunque, según el estudio, en la región madrilea cada vez se come menos, también se gastan menos energías y se hace menos ejercicio, por lo que se siguen ingresando más calorías de las que se queman.

La primera recomendación de los expertos para evitar esta enfermedad es hacer más ejercicio, en una sociedad que cada vez es más sedentaria, según el director general de Prevención y Promoción de la Salud de la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de la CAM, Felipe Vilas Herranz.

Por otro lado, la dieta en la Comunidad de Madrid es ligeramete hipercalórica e hiperproteica, lo que significa que se consumen más grasas y proteinas de origen animal de las que se debería.

Entre los niños es preocupante lo que se ha llamado la "cultura del bollicao", según el secretario general de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, el doctor Moreno Esteban, cultura que anima a la ingesta de grasas de origen animal, que contienen calorías insaturadas y que además producen un aumento del colesterol.

En Madrid cada vez se registran más caso de obesidad infantil, y para prevenirlo se aconseja educar a los niños en alimentación y nutrición, tanto en el colegio como en la familia.

La enfermedad de la obesidad puede tener gran cantidad de complicaciones, como dificultades respiratorias, cálculos en la vesícula, artrosis, hipertensión arterial, diabetes mellitus, arteriosclerosis y trastornos psicológicos, además de otras enfermedades, como la anorexia, que puede provocar la muerte.

En el caso de obesidad la pérdida de peso debe ser lena y paulatina y debe basarse en el ejercicio físico, una dieta personalizada e intransferible y, en caso de necesidad, en la utilización de fármacos recetados por un especialista, que no deben confundirse con las pastillas adelgazantes o píldoras milagrosas.