Esta iniciativa de la Consejería de Hacienda ha sido criticada por el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista y secretario general de la FSM, Jaime Lissavetzky, ya que a su juiio se dan "muchas coincidencias", entre ellas que uno de los beneficiarios sea el Banco Santander, cuyo presidente, Emilio Botín, expresó su apoyo a la formación liderada por José María Aznar.

Según Jaime Lissavetzky, el denominado "contrato del siglo" supondría un movimiento anual de más de 120.000 millones de pesetas.

Al dirigente socialista lo que más le llama la atención es que "en una operación de tal envergadura no se cuente con Cajamadrid, una entidad financiera con clara vocación social, n cuyos órganos de gobierno están representadas todas las instituciones madrileñas y que está estrechamente vinculada a la historia y al desarrollo de la CAM".

"Frente a lo que viene siendo habitual en gran parte de las comunidades autónomas, en las que las cajas regionales juegan un importante papel en la recaudación de tributos, la decisión del Gobierno de la CAM supone un contraste evidente", indicó.